Sin brazos ni piernas pero va camino de ser una gran gimnasta
Harmonie-Rose Allen es una niña de cinco años que, tristemente, perdió las cuatro extremidades debido a una meningitis cuando solo tenía 11 meses.
Sin embargo, no deja que su discapacidad la detenga. Ella no entiende de obstáculos y se está convirtiendo en un ejemplo de coraje y perseverancia para muchos.
Harmonie vive en Bath Somerset, Reino Unido. No solo perdió sus cuatro extremidades, sino que también perdió parte de su nariz debido a la enfermedad.
Por suerte, nada de esto ha supuesto un impedimento en su desarrollo. La pequeña disfruta de la vida, especialmente de una de sus actividades preferidas. La gimnasia artística, para la que entrena duro cada día.
En cuanto a los movimientos y aparatos que debe utilizar, los entrenadores la ayudan y ella encuentra su propia manera de hacer las cosas.
El médico de Harmonie, Paul Baskerville, explicó al Daily Mail que “su entusiasmo y determinación es un ejemplo para todos, para gimnastas, entrenadores y personas no deportistas por igual”.
La determinación de Harmonie ha sido una inspiración para muchos en la comunidad de Bath, que se reunió para recaudar alrededor de $300,000 dólares para destinarlos a la terapia y el equipo que la pequeña necesita.