El empleo sale del bache, en junio se crearon 224,000 nuevos trabajos
La tasa de desocupación queda en el 3.7%
El sector de la construcción mantiene un fuerte ritmo de creación de empleo./Archivo Crédito: Drew Angerer/Getty Images
Junio fue un mes mucho más activo en el mercado laboral de lo que apuntaban las previsiones de los analistas y sobre todo la tendencia de los últimos meses.
La Oficina de Estadísticas Laborales (BLS) reveló a primera hora de este viernes que los empleadores a nivel nacional crearon el mes pasado 224,000 empleos nuevos.
Ese renovado vigor en la creación de empleo ha dado lugar a que más personas estuvieran el la llamada población activa (trabajando o en búsqueda de trabajo) y por ello la tasa de desocupación ha subido ligeramente hasta el 3.7%. Sigue siendo uno de los porcentajes más bajos de las últimas cinco décadas. En el caso de los latinos el desempleo afecta al 4.3% de la población de esta comunidad.
Pocas previsiones apuntaban a una cifra tan elevada de creación de puestos de trabajo debido al bache de los últimos meses en los que ha habido una evolución positiva pero por debajo de la media de los últimos años.
Este viernes se conoció además que ese bache ha sido algo más pronunciado de lo estimado inicialmente ya que las revisiones de las cifras de empleo han sido a la baja tanto en abril como en mayo. En concreto 11,000 empleos menos de los contabilizados.
En los últimos tres meses, incluido junio, la media mensual de nuevos trabajos creados han estado por debajo de los 200,000 al mes, en concreto 171,000. El año pasado en los mismos tres meses la media era de 223,000 empleos. Ahora, con 105 meses seguidos de creación de empleo hay señales de madurez en el mercado de trabajo.
De nuevo los sectores de servicios profesionales, salud, transporte y almacenamiento. La construcción siguió creando empleo (21,000 más en junio) y las manufacturas recuperaron algo del terreno perdido. Como media, este año han sumado 8,000 empleos mensuales en las fábricas frente a los 22,000 del año pasado.
La noticia que siguió sin provocar demasiadas alegrías fue la evolución de los salarios. El incremento promedio de seis centavos a la hora deja el aumento en lo que va de año en el 3.1%. En mayo el avance fue de 9 centavos.
Y sabe a poco después de años en los que se ve que las subidas quieren arrancar pero no terminan de tomar fuerza en uno de los periodos más largos de crecimiento económico.
Si se descuenta la baja inflación registrada el salario real de los trabajadores ha tenido un avance de apenas un 1.3%. Es un porcentaje muy bajo que traslada muy humildemente a los bolsillos de los trabajadores la bonanza económica.
¿La bolsa? A la baja
No obstante y a la vista de que el empleo continua por la senda del crecimiento de una forma más firme los mercados reaccionaron a la baja y los principales índices bursátiles registraban fuertes caídas.
Para los inversores, que llevan días felices con la perspectiva de que la Fed pueda rebajar el precio del dinero en vez de subirlo (y con ello abaratar muchas operaciones a corto plazo) el buen informe de empleo es un jarro de agua fría porque es difícil mantener con esta creación de empleo que la economía necesite estímulos.
No hay perspectivas inflacionistas por lo que no hay un fuerte argumento por la subida pero dada que la creación de empleo se mantiene fuerte, rebajar el precio del dinero a corto plazo en medio punto se plantea ahora como algo difícil, por más que la Casa Blanca presione para ello.
