¿Cuáles son las fuerzas que intervienen en el desplazamiento de un auto?
Cuando un vehículo se desplaza, intervienen un conjunto de fuerzas, algunas a favor y otras en contra
Un auto en reposo está en un punto de desplazamiento cero. Por lo tanto, no interviene ninguna fuerza. Pero cuando este comienza a rodar, se produce un movimiento de fricción, originando que un conjunto de fuerzas se produzcan y afectan al vehículo de diferentes formas.
Hoy conoceremos todas las fuerzas que inciden en el desplazamiento de tu auto.
Fuerza aerodinámica
La fuerza aerodinámica afecta en el desenvolvimiento del vehículo, en cuanto a velocidad y capacidad de de movimiento en su desplazamiento.
La aerodinámica se divide en dos: La fuerza de sustentación que se produce hacia arriba, y la de arrastre, que es la está en contra del movimiento del auto.
Fuerza de inclinación
Esta se produce cuando el vehículo está en una pendiente. Si hay que conducir por una subida, el motor debe tener la suficiente potencia para vencer la resistencia de la gravedad, combinada con la inclinación de la pendiente.
En caso contrario, cuando es una pendiente de bajada, hay que usar los frenos para evitar el desarrollo de velocidades peligrosas.
Fuerza de fricción
Esta es la fuerza que hace que los neumáticos se desgasten. Al moverse el vehículo, se produce una fuerza de fricción debido a la resistencia del movimiento sobre el piso.
Produce que las llantas se desgasten de acuerdo a las velocidades que se desarrollen, y al tipo de terreno.
Inercia
La fuerza de inercia dependerá de la masa o peso del auto. Esta fuerza se produce sobre todo en los cambios, o al momento de frenar. Cuando se va a una velocidad específica, de acuerdo a la velocidad, en el momento de la frenada, el auto se desplazará, ya sea unos metros o unos centímetros, gracias a la energía suministrada previamente.
Por eso, a la hora de conducir, es bueno tener en cuenta cómo funcionan los diferentes tipos de fuerza y la resistencia que estas generan en cuanto a la fricción, a la aerodinámica y la capacidad de maniobrar y de frenar.
Así tendrás un mejor control sobre tu vehículo, y una mayor conciencia a la hora de tomar decisiones mientras conduces.