Mafioso vendía cocaína desde una heladería de Nueva York
Salvatore Russo, asociado al clan Bonanno, se declaró culpable
Salvatore Russo, un reputado asociado de la familia criminal Bonanno, confesó el jueves un plan de narcotráfico que involucró la venta de cocaína por un valor de $40 mil dólares en una heladería no identificada, ubicada en Manhattan.
Russo (46) enfrenta un máximo de 40 años en prisión luego de declararse culpable de distribuir más de 500 gramos de la droga.
Pero sabiamente, según los términos de un acuerdo con los fiscales federales de Brooklyn, Russo acordó cumplir la sentencia mínima obligatoria de cinco años, y puede apelar si se le sentencia por más tiempo, destacó New York Post.
Russo, un ciudadano estadounidense naturalizado de origen siciliano, también enfrenta una multa de hasta $5 millones de dólares.
“Ha aceptado su responsabilidad y espera lo mejor”, dijo el abogado defensor Joseph Conway fuera de la corte.
Russo permanece libre con una fianza de $500 mil dólares en espera de su sentencia sin fecha programada. Fue arrestado el año pasado en lo que las autoridades dijeron que era una ofensiva coordinada y transfronteriza contra los mafiosos que operan tanto en EEUU como en Canadá.
Fue acusado como cómplice del reputado capitán en funciones de Bonanno, Damiano Zummo, quien supuestamente fue capturado en una grabación secreta mientras participaba en una ceremonia de inducción de la mafia en 2015.
Zummo y Russo conspiraron para vender cocaína entre julio y octubre de 2017 dentro de una heladería italiana, según la Oficina del Fiscal Federal de Brooklyn.
Zummo también se declaró culpable de un cargo de drogas en diciembre y está a la espera de la sentencia.
La Cosa Nostra funciona a través de entidades conocidas como “familias”, que en Nueva York son cinco: Bonanno, Genovese, Luchese, Colombo y Gambino. A pesar de ser entidades separadas, los miembros de esta organización colaboran entre ellos en actividades criminales.