La infusión de flor de Hibisco y sus inigualables beneficios

La flor de Hibisco, también conocida como flor de Jamaica es originaria de América y África, es portadora de un color rojo vibrante sumamente característico y conocida por ser una maravillosa bebida para refrescarnos en tiempo de calor; sin embargo se le atribuyen numerosas propiedades medicinales: remineralizantes, digestivas, aperitivas, tónicas, ligeramente laxantes, diuréticas, antiinflamatorias, antiespasmódicas, vasoprotectoras y vasodilatadora. Aporta numerosos beneficios para la salud, entre los principales se encuentran:

• Maravilloso remedio para regular la circulación sanguínea, debido a su alto contenido en flavonoides. 
• Tiene poderes diuréticos, por lo que es un excelente aliado para limpiar el organismo y promueve la pérdida de peso, esto también ayuda a combatir las infecciones del tracto urinario como la cistitis. A la vez esta propiedad resulta positiva para reducir la hipertensión. 
• Cuando se toma como infusión actúa como ansiolítico natural. 
• Actúa como un ligero laxante, por lo que es un gran aliado para facilitar el proceso de digestión y regular el tránsito intestinal. Esto también estimula las funciones hepáticas. 
• Es una potente bebida antioxidante, que actúa protegiendo las células de los efectos de lo radicales libres.
• Aporta grandes cantidades de vitamina C, es por ello que es buena para prevenir y mejorar resfriados y gripes.
• Beneficios para la salud digestiva, su consumo esta indicado para casos de digestiones pesadas, dispepsias, empacho, dolores abdominales, acidez estomacal, entre otros. Es benéfica para aliviar casos de estreñimiento.
• Debido a su contenido en tiamina, vitamina C y la riboflavina, combate los calambres. 

¿Cómo preparar de manera correcta la infusión de flor de Hibisco?

Su preparación es sumamente sencilla, deberás poner a hervir 2 litros de agua y cuando este en ebullición agregarás 100 gramos de flor de Hibisco o Jamaica, permite que hierva por 3 minutos. Posteriormente apaga el fuego, cuela el líquido y permite que repose aproximadamente 10 minutos. Puedes consumirla caliente, tibia o fría con cubos de hielo; la recomendación es no agregar azúcar refinada, es mejor un toque de miel para contrarrestar su sabor ácido.