¿Trump enviaría Ejército a México contra el narco tras masacre de familia LeBarón?
El presidente mexicano deja la puerta abierta para recibir ayuda. ¿De qué tipo?
El presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador envío doble mensaje cuando su homólogo estadounidense, Donald Trump, ofreció ayuda para enfrentar a cárteles de la droga, luego de la masacre de miembros de la familia LeBarón cerca de la frontera.
“Este es el momento para que México, con la ayuda de Estados Unidos, enfrente la GUERRA a los carteles de la droga y los borre de la faz de la tierra”, tuiteó Trump. “Los carteles se han vuelto tan grandes y poderosos, ¡que a veces necesitas un ejército para derrotar a un ejército!”.
….monsters, the United States stands ready, willing & able to get involved and do the job quickly and effectively. The great new President of Mexico has made this a big issue, but the cartels have become so large and powerful that you sometimes need an army to defeat an army!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) November 5, 2019
En respuesta, el mandatario de México dijo que éste “era un asunto” que su país debería resolver, pero luego consideró que si requiere de apoyo se pediría oportunamente, estableciendo que se revisarían los tratados entre ambos países en materia de cooperación de seguridad contra el crimen organizado.
“Voy a hablar con el presidente Trump para agradecerle su apoyo, ver si en los convenios de cooperación hay posibilidad de que se pueda contar con ayuda en el caso de que se necesite”, apuntó. “Entonces solicitaríamos ese apoyo que agradecemos mucho”. La llamada entre ambos se mantuvo en ese contexto, con la puerta abierta, aunque sin especificar si algunas fuerzas armadas serían enviadas, aunque en México tanto el FBI como la DEA tienen amplia operación, tanto en la Embajada, como en consulados.
En una editorial especial, The Wall Street Journal expone la necesidad de que el Ejército estadounidense actúe en México contra los cárteles, tras apuntar que Estados Unidos tiene alta reponsabilidad en el problema, debido al alto consumo de drogas, pero también debe proteger a sus ciudadanos que viven en el vecino del sur.
“Los estadounidenses también deberían reconocer el papel que desempeña su hábito de las drogas en alimentar esta violencia desenfrenada”, apunta la editorial. “El informe del Consejo de Relaciones Exteriores dice que los estadounidenses gastaron casi $150,000 millones en 2016 en cocaína, heroína, metanfetamina y marihuana”.
Destaca que los opioides sintéticos, como el fentanilo, están agravando el problema. De hecho, en 2018, Uttam Dhillon, director interino de la Administración de Control de Drogas (DEA), advirtió que las organizaciones criminales mexicanoas representaban la mayor amenaza de seguridad para los Estados Unidos, debido al aumento de tráfico de droga, especialmente metanfetaminas y fentalino.
“Lo que están haciendo es mezclar fentanilo con heroína, metanfetamina y cocaína, así que cada vez que alguien toma una droga ilegal, literalmente se está quitando la vida”, dijo al canal televisivo de The Hill.
El cruce de esta sustancia ha crecido más del 2,000 por ciento, ya que en 2014 no se incautó una sola libra de dicha sustancia, pero en 2015 se detuvieron 70 libras (31 kilos) y desde entonces el incremento ha sido alto y sostenido: en 2016 fue de 596 libras (270 kilos), en 2017 de 1,875 (850 kilos), en 2018 de 1,785 (809 kilos) y en 2019 2,350 libras (1,065 kilos), según las estadísticas de la oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) .
“Las acciones legales contra el suministro de drogas en medio de tal demanda es una batalla perdida, pero eso no significa que se les permita a los carteles desestabilizar a un gobierno vecino o controlar el territorio como un califato de drogas”, advierte el Journal. “La obligación básica del gobierno es proteger a sus ciudadanos de la ilegalidad, lo que significa no permitir la masacre de mujeres y niños en una carretera en su camino hacia el aeropuerto”.
En una postura frontal, el Journal considera que Estados Unidos tendrá que hacer más para proteger a los estadounidenses en ambos países de los carteles.
“No se puede descartar una operación militar de Estados Unidos”, apuntó.