Prácticos consejos para conservar el ajo por más tiempo en tu cocina
El ajo es uno de los ingredientes más populares de la gastronomía a nivel internacional, es uno de los condimentos más utilizados en la cocina y se le atribuyen espectaculares bondades terapéuticas. Conoce los mejores consejos para optimizar su conservación y alargar su tiempo de vida
El ajo es inconfundible debido a su característico olor y sabor, se ha vuelto uno de los condimentos más utilizados en la gastronomía de las cocinas a nivel mundial y es uno de los ingredientes estrella de la dieta mediterránea.
Entre las grandes virtudes del ajo se destacan sus propiedades medicinales y terapéuticas, es rico en polifenoles, sustancias antioxidantes y un aminoácido que se llama alicina que es responsable de sus espectaculares bondades curativas. Entre sus principales beneficios medicinales se le atribuyen sus propiedades hipotensoras, hipolitemiantes que mejoran la circulación sanguínea, es muy eficaz para regular la presión arterial y ayuda a regular los altos niveles de colesterol alto.
También es conocido como un potente antiinflamatorio, que ayuda a prevenir y combatir infecciones respiratorias y enfermedades que se derivan de procesos inflamatorios como son la colitis, la artritis, el lupus y la enfermedad de Crohn.
El ajo es bueno para desintoxicar al organismo de metales pesados, es un buen aliado para bajar de peso, es conocido como uno de los mejores antibióticos naturales y es poderoso para fortalecer al sistema inmunológico.
Este ingrediente milenario es uno de los más populares en las cocinas de todo el mundo y aunque se destacan por tener un tiempo de vida largo, existen valiosos consejos para optimizar su conservación y proteger sus propiedades organolépticas.
Consejos para conservar mejor el ajo:
1. Tips para elegir los mejores ajos
Siempre compra las cabezas de ajo frescas, enteras y con piel. Deberás fijarte en que estén duras y de buena consistencia, nunca compres aquellos bulbos que estén blandos.
2. Consejos de conservación
Nunca almacenes los ajos en la nevera, ni en áreas húmedas. Las temperaturas bajas lo único que hacen es reblandecerlos y se van a pudrir mucho más rápido. Evita la mala costumbre de guardarlos en el cajón de los vegetales de la nevera, esto solo los deteriora más rápido. Las condiciones correctas para conservar los ajos son los espacios oscuros y secos.
3. Ajos en conserva
Una de las mejores alternativas para mejorar la conservación de los ajos, es guardarlos en recipientes de vidrios, cubrirlos en aceite de oliva, agregar tus hierbas de olor favoritas y tapar bien el frasco. De esta manera pueden vivir perfecto por 3-4 meses, en refrigeración y es perfecto ya que no necesitarás aceite adicional para cocinar.
4. Ajos congelados
Otra buena alternativa es picar o rebanar finamente los ajos, acomodarlos en una bolsa especial y conservarlos en congelación. Siempre que vayas a congelar los ajos deberás contemplar que estén en pelados y picados en la presentación final. Con esta técnica de conservación pueden durar hasta 5 meses en buen estado.
5. Preparar sal de ajo casera
La sal de ajo es una alternativa maravillosa, es el complemento ideal para condimentar nuestras recetas y limitar el consumo de sal. Prepararla de manera casera es sencillo, el primer paso es pelar los ajos y picarlos muy finamente (es recomendable utilizar el procesador de alimentos). En un recipiente mediano mezcla por cada parte de ajo, dos de sal marina, posteriormente coloca la mezcla en un recipiente de vidrio.