Arroz blanco vs. arroz integral ¿Cuáles son las diferencias y qué hace mejor?

El arroz integral y el arroz blanco son muy similares, pero no tienen la misma incidencia en nuestro cuerpo. Cada uno reúne características específicas que pueden hacerlos más o menos pertinentes según el fin que queramos alcanzar. A continuación, ahondaremos en sus diferencias.

Composición

Campo Vivo indica que el arroz integral tiene más fibra que el arroz blanco, pero, en cambio, el arroz integral tiene una mayor cantidad de grasa, carbohidratos, y calorías, lo que indicaría que el arroz blanco es ligeramente más saludable que el arroz integral.

Sin embargo, la cuestión es un poco confusa. Un estudio en la Universidad de Harvard indicó que consumir cinco o más porciones de arroz blanco a la semana incrementaba el riesgo de padecer diabetes tipo 2. El arroz integral, por su parte, disminuía el riesgo de desarrollar la enfermedad.

Lo anterior se debe a que el arroz blanco tiene un índice glucémico más alto, lo que estimula que se descomponga más rápido y aumenten los niveles de glucosa en la sangre y, por ende, haya una mayor respuesta de insulina.

Algo más sobre el arroz integral

A diferencia del arroz blanco, el arroz integral conserva la mayoría de su grano entero, lo que permite una mayor cantidad de fibra, vitaminas y minerales en su composición. Fósforo, magnesio y potasio son algunos de los minerales que destacan en el arroz integral.

El arroz integral tiene mayor fibra, lo que incide en un menor índice glucémico y un mayor proceso de masticación. Si se quiere perder peso, el arroz integral constituye un aliado dado que aumenta la sensación de saciedad y, aunque no es un alivio calórico, sigue siendo bueno para adelgazar.

En conclusión, cada tipo de arroz tiene sus características particulares, y la pertinencia en la dieta dependerá de qué enfoque alimenticio quieras aplicar. Sin embargo, no olvides que lo más importante es tu salud, y que tus decisiones deben girar en torno a ello.