¿Qué es la gripe keto y qué comer para tratarla?

Las personas que inician la dieta cetogénica o dieta keto pueden experimentar náuseas, vómitos, dolores de cabeza y fatiga, dichos síntomas menores y de corto plazo son muestra de lo que algunos llaman gripe ceto o inducción ceto.  

El cuerpo dice: ¡hey, me estas cambiando el combustible!

La gripe ceto es el resultado de desequilibrios temporales en las fuentes de energía, insulina y minerales en el cuerpo.

Los carbohidratos son la principal fuente de energía del cuerpo. La dieta cetogénica promueve cambiar esa rutina, pues es un plan de alimentación con alto contenido de grasas y muy pocos carbohidratos.

En la dieta ceto, una persona reduce su consumo de carbohidratos a menos de 50 gramos (g) por día, en comparación con los 200 a 300 g por día recomendados.

Los síntomas surgen cuando el cuerpo entra en un estado de cetosis

¿Cuándo ocurre la cetosis?

Sucede cuando al no obtener suficiente glucosa, en lugar de utilizar carbohidratos para tener energía, el hígado usa sus reservas para obtenerla, sin embargo no podrá producir suficiente glucosa para mantenerse al día con las demandas y el cuerpo quema un combustible alternativo llamado cetonas, proveniente de la grasa almacenada.

Síntomas

• Náusea
• Vómitos
• Dolor de cabeza
• Fatiga
• Mareo
• Insomnio
• Dificultad para tolerar el ejercicio
• Estreñimiento

También puede presentar otros síntomas que alcanzan su punto máximo entre los días 1 y 4 de la dieta:

• Mal aliento
• Calambres musculares
• Diarrea
• Debilidad general
• Erupción. De acuerdo al doctor Andreas Eenfeldt, el llamado “sarpullido keto“, puede ser problemático e incluso interrumpir el sueño. La picazón y el sarpullido son casi siempre simétricos en ambos lados del cuerpo. Se desarrolla con mayor frecuencia sobre el tórax, la espalda, las axilas y a veces en el cuello.

Los síntomas suelen ser a corto plazo, y duran entre unos días o algunas semanas.

¿Cómo controlar la gripe ceto?

Consumir más fibra para evitar el estreñimiento o diarrea. Verduras con alto contenido de fibra o suplementos que la contengan.

Beber más agua. Las personas que siguen la dieta ceto pueden experimentar deshidratación. Si la persona también tiene diarrea, el riesgo de deshidratación es mayor. Agua y electrolitos ayudan.

Tomar vitaminas y minerales. Un médico puede recetarle tomar suplementos vitamínicos para garantizar que el cuerpo reciba cantidades adecuadas de calcio, vitamina D, zinc y selenio.

Alterando los tipos de grasas que comen. Un artículo publicado en Medical News Today señala que los altos niveles de triglicéridos de cadena media, provenientes de alimentos como el aceite de coco, la mantequilla y el aceite de almendra de palma, pueden causar calambres, diarrea y vómitos.

Comer menos de estos alimentos y más de aquellos con triglicéridos de cadena larga, como el aceite de oliva, puede ayudar a prevenir los síntomas abdominales en las personas que siguen la dieta ceto.

Tomando ciertos medicamentos. Los médicos también pueden recetar bloqueadores de los receptores de histamina 2 o inhibidores de la bomba de protones a las personas que experimentan reflujo ácido.

No confundir la gripe cetogénica con cetoacidosis (potencialmente mortal)

De acuerdo a la Escuela de Salud Pública de Harvard, los cuerpos cetónicos en exceso pueden producir un nivel de ácido peligrosamente tóxico en la sangre, llamado cetoacidosis.

Durante la cetoacidosis, los riñones comienzan a excretar cuerpos cetónicos junto con el agua corporal en la orina.

La cetoacidosis ocurre con mayor frecuencia en personas con diabetes tipo 1 porque no producen insulina, una hormona que previene la sobreproducción de cetonas. En algunos casos raros, la cetoacidosis también sucede en personas no diabéticas que siguen la dieta keto de manera prolongada.

Si desea adoptar la dieta keto acuda con un especialista para determinar si es viable para usted.

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