Sumida en la pobreza y acusada de matar a su pareja, exatleta dominicana Juana Castillo atraviesa el peor momento de su vida

La vida de la exatleta dominicana Juana Castillo nunca ha sido fácil, pero a sus 36 años de edad, atraviesa el momento más complicado al enfrentar una acusación por el homicidio de su pareja sentimental, sumida en la pobreza y en la incertidumbre sobre el futuro propio y el de sus cuatro hijos, los cuales podrían quedar en el desamparo con su madre en prisión.

Castillo Rodríguez saltó a la gloria de su país en la primera década del siglo cuando se convirtió en atleta de élite como integrante de la selección nacional dominicana en la prueba de heptatlón, prueba que requiere el dominio de siete especialidades en el atletismo femenil, por lo que quienes lo practican, son consideradas las exponentes más completas de este deporte.

‘Nachi’, como también es conocida, subió al podio con la medalla de plata en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Cartagena de Indias, Colombia, en 2006, así como en el Iberoamericano de Atletismo en Puerto Rico, además de competir en los Juegos Panamericanos de Río de Janeiro, Brasil, en 2007.

Sin embargo, con el paso del tiempo, aquellas glorias se fueron diluyendo en el olvido y Castillo de a poco fue cayendo en desgracia y penurias económicas a pesar de laborar como segundo teniente en el cuerpo de policía en El Seibo, República Dominicana.

Además de ser madre soltera de cuatro hijos, hace un par de años fue atropellada en un accidente vial, el cual, además de casi costarle la vida, le dejó con severas lesiones en la cara y secuelas permanentes.

Pero como si la vida aún no le hubiera puesto obstáculos suficientes, Castillo fue detenida el pasado martes, acusada de matar a Luis Disla, de 21 años de edad, con un arma punzocortante en la vivienda que ambos compartían, por lo que se imputa por homicidio y violencia doméstica de acuerdo al Código Penal Dominicano.

Sin embargo, de acuerdo a su declaración ministerial, Juana Castillo aseguró que actuó en defensa propia debido a que Disla la habría amenazado con ultrajarla con una tijera en sus genitales. “Llegó a cortarme los panties para revisarme y decía que me cortaría el clítoris para que no viviera con otro hombre”, aseguró.

No obstante, a Castillo se le dictó prisión preventiva y este lunes se tiene programada la primera audiencia del caso, luego de que fuera aplazada tres días a petición de su abogado Guillermo Nolasco, quien establecerá una estrategia legal basada en que el incidente se dio en un contexto de legítima defensa, así como que Disla falleció debido a negligencia médica en el Hospital Teófilo Hernández, en El Seibo.

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