Por qué sería peligroso consumir agua embotellada

A lo largo de nuestra vida hemos dependido mucho del agua embotellada porque, supuestamente, su consumo es beneficioso e inofensivo. Sin embargo, el agua embotellada sí puede ser peligrosa bajo determinadas circunstancias, como veremos ahora.

El rellenado continuo de las botellas

Según un artículo del diario La Vanguardia, el rellenado de las botellas de plástico es contraproducente porque dichas botellas solo pueden ser usadas 1 vez, siendo peligroso el uso posterior que reciba cada una. Esto induce una manipulación continuada que probablemente incentive la contaminación con microorganismos.

En caso de rellenar las botellas con agua clorada, esta puede atacar directamente el envase, produciendo la migración de los compuestos de ella hacía el agua, contaminándola.

Dejar la botella fuera de la nevera (y sin tapón)

Esto es perjudicial para el agua contenida en la botella, que puede recibir polvo o agentes patógenos en general que comprometan su integridad. Dichos microorganismos pueden reproducirse en la botella, lo que es especialmente peligroso para nosotros.

Exponer la botella al sol o fuente de calor

Así como pasa con el agua clorada y las botellas de plástico, dejar el agua embotellada al sol por periodos prolongados de tiempo puede desencadenar una migración de los compuestos de la botella hacia el líquido, lo que nos perjudicará.

Cabe indicar que dicha migración solamente ocurre si la botella está expuesta por mucho tiempo, y no con la exposición ocasional.

Colocar la botella en ciertas superficies o espacios

El plástico es permeable a los olores y sabores. Es decir, si colocamos una botella en un sitio húmedo, es muy probable que el plástico y lo allí contenido adquieran el gusto de dicha superficie.

Tener ciertos cuidados en torno al agua embotellada nos ayudará a beber un líquido de mejor calidad que, a fin de cuentas, nos brindará mayores y mejores beneficios de salud.