Se retira Carlos Tortolero, fundador y director del Museo Nacional de Arte Mexicano en Pilsen
Deja la institución en excelentes condiciones financieras y con sólido prestigio cultural a escala internacional
Después de 37 años como director ejecutivo del reconocido Museo Nacional de Arte Mexicano en Pilsen, y uno de los más reconocidos de Chicago, Carlos Tortolero, uno de los principales fundadores de esta institución, piensa que este tiempo es el preciso para retirarse del cargo.
“Yo soy un aficionado del beisbol y, tú sabes, el famoso Mickey Mantle ya casi no podía ni caminar y seguía jugando y yo tengo que irme, salir ya, porque todos esperan hasta el final. Pero yo opino lo contrario, hay que salir cuando aún podemos y estar en la cumbre del juego”, dijo Tortolero.
Tortolero añadió que el Museo, abierto en 1987, está financieramente sano. Opera con un presupuesto de $8 millones de dólares anuales y con un total de 40 empleados.
“El Museo está en buena forma y nuestra programación esta mejor que nunca”, señaló Tortolero.
Recientemente, la Fundación Ford otorgó al museo un subsidio de $3.3. millones de dólares.
Además, una casa mansión fue donada al museo en Valladolid, Yucatán (México), y en Chicago la ciudad donó la antigua estación de bomberos en las calles 24 y Whipple, que será ocupada por el programa de arte juvenil Yollocalli del Museo.
Aparte de eso, el Museo tiene una exhibición pendiente en Madrid, España, el año que viene y otra posible exhibición en Cuba, según contó el dinámico director.
Dos de los más grandes retos de su estancia dirigiendo esta institución cultural ha sido la continua recaudación de fondos y el trabajo de explicar a los grupos artísticos y filantrópicos la misión del Museo: promover el arte y la cultura mexicana.
“Ellos a veces no entienden nuestra a institución y no comprenden lo que nosotros estamos realizando”, destacó Tortolero.
Tortolero declaró que esperará un poco para que la mesa directiva del Museo encuentre a su sucesor.
“Necesitamos a alguien que se dé cuenta de que vamos a estar involucrados en varias cuestiones de la justicia social, como son los derechos de los inmigrantes, las mujeres, los artistas y otros grupos”, admitió Tortolero.
El Museo Nacional de Arte Mexicano, que permanece con entrada gratis al público desde que se fundó, promueve todas las artes, desde la pintura hasta la danza, la música, el teatro y el cine.
Una obra de teatro que auspició el Museo llega a ganar un Premio Jefferson, se indicó.
Tortolero, de origen mexicano, recordó a La Raza que la idea del Museo surgió en 1982 entre él y un grupo de seis maestros de la Secundaria Bowen en el sur de Chicago.
Aun así, Tortolero mencionó que desde que surgió la idea del Museo, él estaba seguro de que el lugar ideal para este sería Pilsen, el popular barrio activista conocido a nivel nacional.
Como director, Tortolero dijo que ha tenido la oportunidad de conocer a muchas figuras famosas que han visitado al museo. Entre ellas están Barack Obama, Rigoberta Menchú, Octavio Paz, Dolores Huerta, Elena Poniatowska y el líder campesino César Chávez, quien visitó el Museo una semana antes de su fallecimiento ocurrido el 23 de abril de 1993 en San Luis, Arizona.
De entre todas estas figuras, Tortolero dijo que con la que ha desarrollado una amistad duradera es con Elena Poniatowska, escritora y periodista mexicana.
“He visitado su casa y todo, Elena es una buena amiga mía”, dijo Tortolero con entusiasmo.
En la pared de su oficina cuelga una foto de dicha escritora con sus palabras que leen “Lo que ha hecho Carlos Tortolero en su Museo en Chicago es una tarea extraordinaria de su amor a México”.
El reconocido artista Nicolás de Jesús, desde su natal Ameyaltepec, México, alabó el trabajo de Tortolero en las artes y dijo que merece ser reconocido.
“Creo que se merece un gran reconocimiento por haber alzado a niveles muy grandiosos al Museo”, dijo de Jesús. “Sera recordado por su trabajo.”
Y aunque el personal del Museo está un poco triste porque el capitán de la nave se va, todos le desean lo mejor y admiran su gran talento como director.
“Todos le deseamos lo absolutamente mejor para él”, dijo Cesáreo Moreno, el curador principal y director de artes visuales del Museo, quien ha trabajado con Tortolero por 33 años.
Moreno mencionó que admira el talento de Tortolero para hacer decisiones clave y espera que su sucesor reconozca el amor que Tortolero le tiene a la comunidad y a la cultura mexicana y también su habilidad para recaudar fondos.
“Ha sido un honor trabajar con él”, dijo Raquel Juárez, gerente de ventas en el Museo, quien tiene 18 años desempeñando su trabajo ahí.
Juárez dijo que todos le desean a Carlos, como le llaman, que viaje mucho pero que aun así lo van a extrañar.
Una vez que se jubile, Tortolero dijo que pasará más tiempo con su nieto, hará trabajos de consulta en las ramas del arte y dedicará más tiempo a escribir.
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