5 vegetales que podrías estar lavando mal
Después de la cosecha, tus vegetales pasan por muchos manos y se incrementa el riesgo de contaminación
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Una limpieza correcta de tus vegetales retirará no solo los restos de tierra, también insectos y se reduce la cantidad de microbios.
Lava los productos frescos antes de pelarlos de manera que la suciedad y la bacteria no se transfieran del cuchillo a la fruta o el vegetal.
Considera que durante la etapa de crecimiento, las frutas y verduras pueden contaminarse con la tierra, agua o el fertilizante. Después de la cosecha, pasan por muchos manos y se incrementa el riesgo de contaminación.
Muchas verduras se pueden lavar bajo un chorro de agua fría. De acuerdo a la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) no se necesita usar jabón o un producto especial para lavar productos frescos.
Las que tienen la piel firme o gruesa deben lavarse suavemente con un cepillo para ayudar a eliminar los microbios difíciles de eliminar.
Hay verduras que requieren especial atención y te decimos cómo limpiarlas.
Brócoli y coliflor
En los rincones y grietas del brócoli y la coliflor se esconden los gérmenes y pequeños insectos. Remoja estas verduras en un recipiente con agua fría durante dos minutos, luego colócalas en un colador y enjuágalos bajo el chorro de agua fría.
Verduras de hoja verde
Desecha las hojas externas de las cabezas de lechuga o repollo (col).
Remoja las verduras de hoja verde en un recipiente con agua fría durante dos minutos antes de enjuagarlas con agua corriente fría para eliminar la suciedad o los gérmenes atrapados.
Cebollas verdes
En los tallos de cebolleta o cebollín se puede esconder la tierra. Quita las partes marchitas y enjuaga en agua corriente fría, procura llenar y drenar los tallos.
Hongos
No coloques tus champiñones o setas en remojo, ya que absorberán demasiada agua y no se cocinarán bien. Usa un cepillo seco para eliminar la suciedad y los microbios. Si está muy sucio limpia con una toalla de papel húmeda o enjuaga con agua fría rápidamente.
Verduras de raíz
No creas que solo debes lavar las papas y zanahorias que cocinarás sin piel, aún si piensas pelarlas debes lavarlas.
Remójalas en agua fría durante unos minutos enjuágalas con agua corriente fría y frotarlas con un cepillo limpio para eliminar la suciedad adherida a la piel.
