Alcalde Johnson y CPS inauguran centro de bienvenida para estudiantes migrantes en preparatoria Roberto Clemente
De resultar un éxito el programa piloto, la iniciativa sería extendida a otras comunidades de Chicago, según funcionarios de la ciudad
El Municipio y las Escuelas Públicas de Chicago (CPS) anunciaron el pasado lunes 17 de julio la creación de un centro de bienvenida para migrantes recién llegados en edad escolar.
CPS está lanzando este programa piloto en la preparatoria Roberto Clemente para optimizar la asistencia de inscripción y el acceso a los servicios sociales y de salud de menores migrantes a medida que ingresan a las aulas.
El centro de bienvenida al migrante inició operaciones el pasado martes en el segundo piso de la escuela secundaria Roberto Clemente Community Academy. La atención es por cita.
Este programa piloto, para los hijos menores de inmigrantes que llegaron a Chicago de Texas, está ubicado dentro de las instalaciones de la escuela Roberto Clemente y ofrecerá servicios de inscripción a las escuelas para niños migrantes que viven en el área de West Town y Humboldt Park.
Según las Escuelas Públicas de Chicago (CPS) como parte de los servicios se ofrecerán inscripción escolar, exámenes de salud y vacunas para los menores migrantes recién llegados.
Más de 11,000 migrantes en su mayoría solicitantes de asilo han llegado a la ciudad en autobús o en avión a Chicago desde estados fronterizos como Texas.
“Quiero ser muy claro, esto no es un refugio”, dijo el director ejecutivo de CPS, Pedro Martínez. “Es un lugar donde las familias de esta parte de la ciudad que han sido referidas pueden venir, inscribirse y conectarse con los servicios”.
Martínez también dijo que “un centro dentro de una escuela agiliza el proceso en lugar de tratar de navegar por diferentes citas con diferentes departamentos”.
Funcionarios de CPS hacen hincapié que en el centro de bienvenida al migrante solo se atenderá con cita, la cual será otorgada a través de referidos del Departamento de Servicios de Niños y Familias.
De resultar un éxito el programa piloto, la iniciativa sería extendida a otras comunidades de Chicago, según funcionarios de la ciudad.
Atención solo con cita
Este centro “va a permitir agilizar la registración a fin de que los migrantes en edad escolar puedan entrar a una escuela de CPS, también se les van a ofrecer servicios sociales y de salud, explicó a La Raza Pablo Alvarado, subdirector de la escuela secundaria Roberto Clemente. “Voy a estar comunicándome con estos refugios, ellos me van a estar proveyendo nombres de las familias de los estudiantes basados en la edad que los niños tienen para atender a la escuela, voy a estar invitando a esas familias por cita a que vengan aquí para registrar a los niños”.
El programa se desarrolla en el segundo piso de la preparatoria Roberto Clemente. “No tiene nada que ver con los salones de clase, sale [la persona] del lugar por una salida privada en donde no interrumpe a nadie, todo eso fue pensado ya”, dijo Alvarado en entrevista con La Raza.
Alvarado piensa que el programa va a tener mucho éxito porque la necesidad es grande: “sé que si esto funciona y podemos dar un servicio adecuado, yo creo que se van abrir muchos otros centros”.
Tanto Martha Valerio, coordinadora de padres, y Alvarado recalcaron que para que todo sea muy organizado y coordinado solo se atenderá por cita.
Alvarado destacó que la razón por la que están trabajando por cita es porque quieren dar un servicio adecuado y que no se aglomere mucha gente. “Esta es una oficina central de registración, tenemos que mantener un orden de cuántos niños estoy enviando a X escuela o secundaria, por eso es que estamos trabajando primero con los refugios dándoles la prioridad a esos niños. No estamos abiertos al público para evitar un desorden”.
El martes, en el primer día de atención con cita, Pablo Alvarado dijo que ya asistieron a unas familias.
Alvarado contó a La Raza que llegó a Estados Unidos desde Ecuador siendo un adolescente, hace 30 años. El inmigrante es graduado de las Escuelas Pública de Chicago. “Soy un inmigrante que emigré aquí, también vine de joven a estudiar a una escuela pública, de primera mano yo sé la necesidad y qué necesitamos, ese trato de paisano a paisano”.
“Todos nosotros aquí somos bilingües, hispanohablantes, les vamos a poder dar un servicio apropiado y la expectativa es que este programa que le llamamos piloto siga en continuidad y se puedan seguir otros modelos a otra secundarias u otras escuelas en Chicago”, remató Alvarado.
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