Llaman a la comunidad a marchar el lunes 21 de enero en Chicago
Organizaciones, iglesias y grupos pro inmigrantes piden al presidente Barack Obama una moratoria a las deportaciones y convocan a una marcha en Chicago.
Chicago.- La marcha que se llevará a cabo el lunes 21 de enero en el centro de Chicago tendrá como enfoque principal pedir una moratoria a las deportaciones, según indicaron los organizadores en una conferencia de prensa realizada esta semana en la Plaza Daley.
Durante el primer mandato del presidente Barack Obama se han deportado 1,5 millones de personas. Las semanas después de la reelección presidencial se llevaron a cabo redadas en la fábrica Chicago Palette Company, en el suburbio de Elk Grove Village y en una esquina de jornaleros en el noroeste de la ciudad, indicaron los organizadores.
“Los jornaleros estamos sufriendo a causa de las deportaciones, queremos que el presidente Obama nos escuche; no queremos que la policía actúe como la ‘polimigra’ y queremos que la comunidad jornalera venga a marchar este lunes”, dijo a La Raza José Gallardo, jornalero y organizador de la Unión Latina de Chicago.
La marcha, que iniciará en la Plaza Daley a las 11 am, culminará en la Plaza Federal. La organizan la Misión Católico Anglicana Nuestra Señora de Guadalupe, Centro Sin Fronteras, la Unión Latina de Chicago, la Coalición de Illinois Pro Derechos de Inmigrantes y Refugiados de Illinois (ICIRR), la Fuerza Juventud y la Alianza de Jóvenes Inmigrantes por la Justicia (IYJL), entre otras.
“NUESTRA GENTE EN LAS CALLES”
José Landaverde, padre la Misión Católico Anglicana Nuestra Señora de Guadalupe, dijo a La Raza que “se está exigiendo una moratoria a las deportaciones inmediatas y que el presidente Obama cumpla sus promesas”.
“Vamos a darle una carta al senador Richard Durbin el día 21 y al senador Mark Kirk (R-IL), en la que les estamos pidiendo que intercedan en los casos de estas familias para que sus esposos y familiares no sean deportados”, dijo Landaverde, refiriéndose a los inmigrantes detenidos en las redadas realizadas en Chicago.
Por su parte, Tania Unzueta, coordinadora del grupo IYJL, dijo que “muchos de nosotros hemos estado privilegiados de calificar para la Acción Diferida, muchos de nosotros hemos recibido licencias de conducir y estamos de alguna manera seguros ante una deportación; pero el resto de nuestra comunidad sigue en peligro”.
Un caso es el de Josefina Mora, quien dijo a La Raza: “Tengo tres hijos y mi esposo se encuentra detenido por inmigración por manejar sin licencia; ahora las cosas se han puesto muy difíciles para mí y mis hijos”.
Unzueta hizo hincapié al decir que se le está pidiendo a la comunidad que salga a marchar porque “se necesita ver el poder de nuestra gente en las calles, y por supuesto vamos a seguir luchando por una reforma migratoria; pero mientras eso pasa tenemos que parar las deportaciones”.
Asimismo, Artemio Arreola, director político de la ICIRR, le recordó al presidente que “el no haber efectuado una reforma migratoria fue su gran fracaso [durante su administración pasada]”.
“Le hemos dado una segunda oportunidad, no la desaproveche, los amigos nos cumplen, usted nos prometió que en su segundo periodo sería una realidad la reforma migratoria, queremos que usted actúe con lo que usted sí puede hacer”, exclamó Arreola dirigiéndose al presidente.