Mujeres destacadas: Giselle Mercier
Giselle Mercier ha dedicado su carrera artística a resaltar sus raíces panameñas y destacar el trabajo de otras artistas latinas de Chicago.
Giselle Mercier es la directora ejecutiva de Elevarte, la organización comunitaria en Pilsen, que ofrece cursos de arte para jóvenes y adultos. Crédito: Irene Tostado / La Raza
Chicago.- Desde que su hija tenía cuatro años, la mamá de Giselle Mercier se percató de la sensibilidad que poseía por el arte visual. “Mi mamá siempre cuenta la misma historia sobre el día en que se quedó impresionada con el dibujo de mi familia porque mis bolitas [cuerpos] estaban vestidas; mi mamá tenía botones y mi papá una corbata”, recordó la panameña de 49 años en entrevista con La Raza.
La carrera artística de la directora ejecutiva de la organización comunitaria Elevarte comenzó en 1984, a la edad de 19 años, después de que abandonó el ballet, que practicó por 15 años porque “no encontraba una pareja de su altura”.
Mercier heredó su interés por el arte de su mamá, quien cosía sus propias cortinas, y su lado emprendedor se lo acredita a su papá, quien fue el primer panameño que ocupó el puesto de director de recursos humanos de la Comisión del Canal de Panamá en el año 2000.
Sin conocer a nadie en Chicago, Mercier se mudó a la ciudad y se involucró en el Art Institute de Chicago. Fue una de casi 13,000 inquilinos del ‘Three Arts Club’ de Chicago, un proyecto de vivienda para artistas mujeres que funcionó desde 1912 y hasta el 2003.
“Cuando yo llegué aquí era la Meca para artistas porque era lo más barato comparado con Nueva York, pero también aprendí que era una ciudad polarizada porque en Panamá todos están mezclados y no existe la segregación”, explicó Mercier, cuyo abuelo fue un inmigrante francés.
Después de cuatro años en el Art Institute de Chicago, trabajó en el Museo Nacional de Arte Mexicano, donde se dedicó a abrir camino a los artistas que nunca se habían exhibido en público.
En 1996, mientras colaboraba con la galería Randall Street, decidió organizar una de las primeras exhibiciones que destacaran las creaciones de mujeres latinas en Chicago. Se llamó ‘Mujeres de Pelo en Pecho’ porque las artistas eran “las mujeres más poderosas que estaban haciendo arte por toda la ciudad”.
Junto con una amiga chilena también organizó una retrospectiva de 60 mujeres latinas de Chicago que concebían todo tipo de arte.
Asimismo, Mercier es aficionada de la tradición mexicana de Día de los Muertos. De niña se interesó en los altares, después de ver los que construían los residentes de Colón, Panamá, para practicar la santería.
En el 2009, Mercier inició una nueva etapa en su vida y tomó las riendas de ProsArts -ahora Elevarte, la organización comunitaria de Pilsen que ofrece clases de arte a niños y jóvenes. En tres años y durante la recesión, Mercier logró aumentar el presupuesto de la organización en un 20%.
Siempre ha abogado por la educación artística en el contexto cultural y sueña con regresar a Panamá para compartir todo lo que ha aprendido sobre el arte y la administración de una organización comunitaria.
Por destacar contribuir al arte latino en Chicago Mercier recibirá un reconocimiento como una de las Mujeres Destacadas por el periódico La Raza en la categoría de Arte y Cultura.
