Religiosos protestan por la deportación de inmigrantes
Religiosos anuncian campaña desobediencia civil contra las deportaciones en Chicago para protestar contra la criminalización y deportación de los inmigrantes indocumentados y exhortan a resistir sistemas que generan ganancias a costas de la detención, militarización de la frontera y otros productos y servicios relacionados con las políticas de inmigración.
Crédito: Archivo
Chicago.- Religiosos de diversas denominaciones agrupadas en la Coalición Nuevo Santuario de Chicago anunciaron una campaña de desobediencia civil para protestar la criminalización y deportación de los inmigrantes indocumentados.
En una declaración divulgada ayer, la coalición que reúne a más de cien grupos y líderes metodistas, luteranos, bautistas, católicos y judíos, anunció su arrepentimiento porque, “como nación, no hemos podido defender los derechos inalienables de las personas más vulnerables entre nosotros”.
Reunidos el domingo en la Iglesia Central Bautista de Chicago resolvieron realizar actos no violentos de desobediencia civil, ayunos, vigilias y oferta de santuario en sus hogares y congregaciones.
“Cada congregación resolverá de qué manera dejará de cooperar con este sistema cruel de inmigración”, señaló la reverenda Sara Wohlleb de la coalición.
En la declaración, los religiosos prometen resistir las deportaciones de más de 400.000 indocumentados todos los años, “el nivel más alto en la historia de nuestra nación y resultado de un sistema cruel y roto”.
Asimismo, aseguran que lucharán contra la criminalización del inmigrante en el entendido de que “la búsqueda de la sobrevivencia es un derecho de cada hombre, mujer y niño otorgado por Dios”.
“Necesitamos reconocer, como nación, las consecuencias de nuestros tratados de libre comercio, militarización y otras acciones”, señala.
En la declaración también se exhorta a resistir sistemas que generan ganancias a costas de la miseria de otros que son “obtenidas por varias empresas en el negocio de la detención, militarización de la frontera y otros productos y servicios relacionados con nuestras políticas de inmigración”.
“Creemos que dichos tipos de ganancias son inmorales y ofensivos a Dios”, expresan.
Según la declaración, la resistencia se realizará mientras continúen las deportaciones y las negociaciones sobre la reforma migratoria sigan paralizadas en el Congreso.
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