La sandía y sus múltiples beneficios
Además de su color y dulce sabor, la sandía enriquece el cuerpo con nutrientes biológicos para una buena salud
La sandía es la fruta fresca que más contenido de agua posee, casi un 93%. Si deseas bajar de peso, cómela como postre o merienda.
Es un excelente antioxidante, ideal para prevenir el envejecimiento.
Es fuente de fibra, ayudando al tránsito intestinal.
Es una maravillosa fuente de beta caroteno, el cual se convierte en vitamina A en el organismo. La vitamina A ayuda a producir los pigmentos en la retina del ojo y protege contra la degeneración macular relacionada con la edad. También previene la ceguera nocturna.
Posee el potencial para reducir la inflamación crónica, la cual se sospecha que causa enfermedades tales como el asma, la diabetes, la artritis, la enfermedad coronaria y ciertos tipos de cáncer.
Es la fruta preferida por los atletas por sus propiedades para calmar la sed. Normalmente, los atletas se comen una sandía o beben un vaso de jugo de sandía un día antes de someterse a actividades extenuantes, ya que mejora su condición física y mental.
Posee un efecto beneficioso para el corazón y ayuda a controlar la presión sanguínea. Esto se debe a que la sandía es rica en citrulina, un aminoácido que relaja y dilata los vasos sanguíneos ayudando a que la sangre fluya por todo el cuerpo.