Ni el perdón del gobernador ni la decisión de un juez lo salvó de caer en la manos de ICE
La increíble historia de un inmigrante cubano que lucha por evitar su deportación
Un juez ordenó su libertad pero el gobierno apeló y lo mantiene tras las rejas Crédito: EFE
La batalla legal del cubano René Lima Marín, residente en Colorado, continuará en una corte federal de inmigración luego de que el Servicio de Inmigración y Aduanas (USCIS) rechazase dejarlo en libertad y apelase el caso para poder proseguir con el proceso de deportación.
Según Aaron Elinot, abogado defensor de Lima Marín, ICE aseguró ante una corte en Denver (Colorado) que hasta que no haya una decisión final sobre su apelación el cubano deberá permanecer detenido, a pesar de la decisión del pasado 5 de octubre de un juez que había pedido la libertad del inmigrante.
Le compete ahora a la Junta de Apelaciones de Inmigración de EEUU (USBIA) emitir un veredicto sobre el futuro de Lima Marín.
El inmigrante, de 38 años y que llegó desde Cuba cuando solamente tenía un año, fue detenido en 1998 cuando era adolescente, lo que le llevó a figurar en la lista de inmigrantes con antecedentes criminales que el Departamento Penitenciario de Colorado comparte con las agencias federales de inmigración.
Por este motivo, el inmigrante cubano corre el riesgo de ser deportado porque su permanencia legal en el país fue revocada tras el robo a mano armada cometido en 1998, aunque logró salir en libertad condicional y posteriormente su caso fue cerrado.
En 2008 se decidió que su expulsión del país no era una prioridad porque en ese momento no había relaciones formales entre Cuba y Estados Unidos, pero el caso se reabrió luego de que Washington y la Habana restableciesen las relaciones diplomáticas en 2014.
Fue entonces que se descubrió que las sentencias que le fueron impuestas deberían haber sido sucesivas y no simultáneas, por lo que Lima Marín fue detenido y nuevamente encarcelado.
En mayo pasado, un juez dictaminó que el cubano debería quedar en libertad. Poco después, el gobernador de Colorado, John Hickenlooper, concedió clemencia a Lima Marín y la legislatura local aprobó una resolución pidiendo su liberación.
Pero el mismo día que iba a quedar en libertad, fue arrestado por el Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) para su deportación, situación que se mantiene hasta la fecha.
