Phil Murphy le quita el poder a los republicanos en el Estado Jardín
Los primeros recuentos muestran que el candidato demócrata derrotó en las urnas a Kim Guadagno, en lo que promete ser un rumbo progresista para el estado, en defensa de los inmigrantes
Las promesas del demócrata Phil Murphy de convertir a Nueva Jersey en un estado santuario, promover el aumento del salario mínimo a $15 e invertir más en la educación superior, dieron sus frutos, pues este martes triunfó en las urnas y se convirtió en el próximo gobernador del Estado Jardín.
Así lo muestran los primeros recuentos en las urnas, que hasta el cierre de esta edición confirmaron los sondeos que daban a Murphy una ventaja sobre su principal rival, la republicana Kim Guadagno, actual secretaria de Estado del gobernador Chris Christie, quien dejará el cargo en enero próximo, con bajos índices de popularidad y duras críticas de la comunidad hispana.
“Gracias Nueva Jersey. Estamos listos para regresar a Trenton”, comentó el líder demócrata en su cuenta de Twitter tras conocer los primeros resultados y mostrando que pondrá fin a la línea pro Washington de Christie.
“Estoy realmente honrado de ser el próximo gobernador de Nueva Jersey, especialmente sabiendo que ustedes son la razón por la que estoy aquí”, agregó el gobernador electo del Estado Jardín. “Ahora es el momento de ponernos a trabajar. Juntos podemos hacer esto”.
El triunfo demócrata acaba de esta manera con el poderío republicano que había reinado en Nueva Jersey durante los últimos 8 años y activistas e inmigrantes no ocultaron su emoción con el cambio de rumbo político que tendrán los vecinos de la Gran Manzana.
“Pasó lo que tenía que pasar, pues este estado ya necesitaba tomar un rumbo distinto”, comentó el peruano Juan Costa, residente en Union City, Nueva Jersey. “El triunfo de Murphy también es una derrota del discurso anti-inmigrante de Trump”.
Edison Hernández, de la organización Se Hace Camino Nueva Jersey, destacó que el triunfo del demócrata abre una puerta de esperanza a la comunidad inmigrante.
“Murphy prometió el aumento de los salarios a $15 la hora, las licencias de conducir y el amparo de los Dreamers”, comentó el uruguayo.
El mismo sentimiento embarga a la mesera Rosa Aguirre, quien a pesar de no haber podido votar por su estatus migratorio siente que el cambio de rumbo del estado le dará mayores protecciones a los inmigrantes.
“Así como están las cosas con el gobernador Christie uno se siente muy miedoso porque él es amigo de Trump, pero ahora podemos respirar más tranquilos”, dijo la mujer.
Murphy, quien era el favorito de las bases latinas de votantes, además de defender el recorte de impuestos y centrar su discurso en el crecimiento y ayuda a la clase media, promete que se opondrá a que la policía y las autoridades del estado ejerzan labores de inmigración y no colaborará en deportaciones masivas. También tiene dentro de sus prioridades trabajar por mejores escuelas, igualdad en salarios, reducción de matriculas en universidades, protección del medio ambiente y la defensa de los derechos LGBT.