¿Cuáles son los síntomas de los quistes en los ovarios?
La gran mayoría de los quistes no son peligrosos, pero un grupo de ellos pueden ser cancerígenos
Una mujer atenta su salud sexual debe estar pendiente de no desarrollar quistes ováricos. Y si no sabes con exactitud qué es esto, aquí empezaremos a aclararlo.
¿Qué es un quiste de ovario?
Los quistes de ovario son sacos o bolsas llenas de líquido en un ovario o en su superficie. Y son medianamente frecuentes, ya que millones de mujeres desarrollarán uno o varios a lo largo de sus vidas.
La mayoría de los quistes ováricos presentan pocas o ninguna molestia y no son perjudiciales. Pueden desaparecer en algunos meses sin tratamiento alguno. No obstante, los quistes ováricos pueden presentar graves complicaciones.
Causas
Los quistes tienen estructuras similares que se conocen como folículos.
Los folículos crecen todos los meses, generan estrógeno y progesterona, y liberan 1 óvulo cada vez que ovulas. Si el folículo sigue creciendo, se le conoce como “quiste funcional”.
Los quistes funcionales son inofensivos, pocas veces provocan dolor, y suelen desaparecer por sí mismos en dos o tres ciclos menstruales.
Después de que el quiste libera el ovulo, empieza a producir las hormonas previamente mencionadas. El folículo responde al nombre de “cuerpo lúteo”. De vez en cuando, se acumula líquido dentro del folículo; se expande el cuerpo lúteo, y se forma el quiste de ovario.
Síntomas
Un quiste ovárico grande puede presentar los siguientes síntomas
- Dolor pélvico
- Sensación de saciedad o de pesadez en el abdomen
- Hinchazón
- Piel fría y húmeda
- Respiración rápida y aturdimiento
Complicaciones
Algunas mujeres pueden presentar quistes menos frecuentes que el doctor puede hallar durante un examen pélvico. Si se producen masas quísticas después de la menopausia, ellas pueden ser cancerígenas. Dado esto, es importante hacerse chequeos con regularidad.
La rotura de un quiste puede provocar un dolor intenso y sangrado interno. Y el riesgo de rotura es directamente proporcional al tamaño del quiste.
Por último, es importante aclarar que la alta actividad de la pelvis, como el acto sexual vaginal, aumenta también el riesgo de rotura.