Las Bolsas abren, se caen, se paran y vuelven a desplomarse
La bajada de tasas por parte de la Fed avisa de la gravedad a los inversionistas
Histórica y caótica. Así se presentaba la apertura de las Bolsas dadas las posiciones anticipadas en los mercados de futuros. Y así ha ocurrido en los tiempos de coronavirus.
Poco después de la apertura de la jornada de intermediación las caídas superaron el 8%, el Dow caía más de 2,000 puntos, y se activaron los frenos automáticos para parar la contratación durante 15 minutos. Es la tercera vez desde la semana pasada que esto ocurre. La pausa no calmó todos los ánimos.
Una vez que se reactivó la cotización, el Dow llegó a caer un 11% — llegó a perder 2,800 puntos– y el resto de los índices siguió esa tendencia. En el momento de cerrar esta nota. Las 10:00 am ET, las caídas se estabilizaban por encima del 9%. El bono a 10 años, que con su cotización da una medida crítica de cómo funciona la liquidez en este mercado, tiene un rendimiento del 0.82%, por debajo del viernes cuando se notaron las tiranteces en el mercado.
La caída de las Bolsas llega después de que la Reserva Federal y el resto de los bancos centrales del mundo decidieran optar por las medidas tomadas en el año 2008 para luchar contra la crisis financiera y económica. Con las mismas herramientas esperan tratar una crisis de salud mundial con consecuencias económicas y financieras.
Así, el domingo la Fed redujo las tasas de interés a corto plazo al 0%-0.25% cuando estaban a 1%-1.25%. Además abrió una línea de préstamos en el mercado interbancario para asegurar la estabilidad financiera por valor de 700,000 millones y coordinó con los bancos centrales del resto del mundo una acción para estabilizar el dólar, moneda de referencia en intermediaciones globales.
Las medidas que se han puesto en marcha y otras que necesariamente se pondrán tratarán de contener que una crisis de salud global que se traslada inmediatamente a la demanda, se convierta en una recesión económica y una crisis crediticia. Históricamente es mucho más difícil salir de una crisis de crédito que de cualquier otra, de ahí que la Fed esté poniendo en marcha todos los mecanismos necesarios para que funcione este mercado y las empresas y los hogares puedan seguir tomando dinero prestado.
El FMI también está preparado para poner a disposición de los estados $1 billón de dólares (one trillion en inglés) en préstamos para aliviar con el impacto económico del coronavirus.