8 errores que cometes al comprar, comer y guardar tus quesos

Si quieres sabor y calidad es preferible rallar tu queso en casa.

Foto: NastyaSensei/Pexels

Foto: NastyaSensei/Pexels Crédito: NastyaSensei | Pexels

Si te encanta el queso es importante que tengas presente que es un alimento vivo al que debes tratar con ciertos cuidados y evitar errores afectan su conservación, consistencia, sabor y en consecuencia su disfrute.

1. Comprar queso rallado

No todos los quesos rallados están elaborados únicamente a partir de queso. Algunos son elaborados a partir de una mezcla de queso natural con otros ingredientes como la mantequilla, las proteínas de leche, sales, conservantes o los almidones. Se les denomina quesos rallados fundidos.

Si quieres sabor y calidad es preferible rallar tu queso en casa.

2. Dejarlo expuesto y a temperatura ambiente

No es recomendable que el queso esté expuesto ya que puede recibir la visita de insectos y otros animales. Además el alimento requiere de temperaturas frías –más si es blando-. Cuando abres un queso, deja de estar protegido por su corteza y es más ágil su degradación.

3. Almacenarlo en plástico

No es una buena idea envolver un queso abierto en plástico ya que lo sofoca y atrapa la humedad, propiciando no solo un sabor desagradable, sino que aparezca moho y se vuelva viscoso. Envuelve el queso en un papel encerado o papel para hornear, y luego guardarlo sin apretar en una bolsa de plástico.

4. Colocarlo en la zona más fría el refrigerador

No todos los quesos requieren de la misma temperatura. En la parte alta del refrigerador guarda los quesos frescos (requesón, formaggini, mozzarella, petit suisse, queso crema…) ya que necesitan estar a 4 grados, recomienda El Queso.

Usa los cajones inferiores que normalmente se utilizan para la verdura para los quesos de tapa dura, ya que es la zona menos fría y la temperatura ideal de este tipo de quesos es entre 8 y 12 grados

5. Congelarlo

Congelar tu queso modifica la textura y podría disminuir su sabor y aroma. Además los cristales de hielo pueden alterar la estructura proteica del queso.

6. Comer el queso muy frío

El frío atenúa el sabor y modifica su textura, lo vuelve quebradizo. Luego de sacar tus quesos de la nevera, deja reposar tus quesos fuera de la nevera unos minutos antes de disfrutarlo, en clima cálido, no más de 20 minutos.

7. Hacerlo cubos

Al queso Oaxaca le gusta ser deshebrado, mientras que los quesos duros deben cortarse en cuñas,en triángulos finos como si fuera un pastel, así obtendrás la misma proporción de corteza.

8. Cubrir con acompañamientos antes de probarlo solo

Prueba el queso solo para saber todo el sabor que ofrece y en relación a ello agregar tu mermelada o miel favorita.

En esta nota

Cocinar mejor compras inteligentes conservación de los alimentos guardar quesos queso queso rallado Tips de cocina
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain