La fábrica de General Motors en México reanuda operaciones bajo estrictos protocolos de seguridad
Las nuevas prácticas de seguridad es solo parte del trabajo que las empresas deben hacer para garantizar la seguridad de los trabajadores
El día de ayer por la tarde fue el turno de las plantas de General Motors (GM) en Ramos Arizpe, Coahuila y Silao, Guanajuato, México para re-abrir su puertas y reanudar la producción de vehículos.
La re-apertura de las plantas en México va con estricto protocolo de salud y seguridad para salvaguardar la integridad de todos sus empleados.
Hay que tener en cuenta que GM no han registrado ningún caso de transmisión de COVID-19 en otras plantas desde que adoptaron los nuevos protocolos de seguridad. El fabricante de autos se ha estado preparando durante semanas para reabrir sus fábricas en un esfuerzo por reiniciar el trabajo en una industria que representa una fuerte actividad económica.
Sin embargo las plantas de ensamble, ubicadas en Ramos Arizpe y Silao, aún no abren, pero posiblemente se puedan reiniciar actividades a partir de hoy 22 de mayo, dependiendo del estatus de sus proveedores.
GM ha reanudado su actividades, pero ha tenido que implementar un robusto protocolo de seguridad sanitaria, de acuerdo a las acciones que la empresa ha tomando a nivel global y alineados con las recomendaciones de organismos y autoridades, siendo esto una prueba vigilada para saber si los trabajadores de una amplia gama de industrias pueden regresar a las fábricas en grandes cantidades sin un resurgimiento de infecciones por COVID-19.
El incluir estas nuevas prácticas de seguridad es solo parte del trabajo que las empresas deben hacer para garantizar la seguridad de los trabajadores, evitar contagios y reabrir sus fabricas después de un cierre extraordinario.
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