Miembros de la MS-13 condenados por asesinato de joven en Long Island
Los convictos, supuestamente sospechaban que Sidney Valverde colaboraba con el NYPD y por eso lo ejecutaron
Tres miembros de la Mara Salvatrucha (MS-13) fueron condenados a entre 24 y 27 años de cárcel, este jueves, por tramar el asesinato al estilo de una ejecución de un compañero del que sospechaban que colaboraba con el Departamento de Policía de Nueva York (NYPD).
Milton Contreras, Oscar Welman Espinoza-Merino y Jose Osmin Rubio fueron procesados por el ataque mortal a Sidney Valverde, de 19 años, a quien pidieron que llegara a Long Island en 2014, fingiendo que lo necesitaban para negocios de la pandilla, según fuentes policiales. Fue entonces cuando le dispararon en la parte trasera de la cabeza y se deshicieron de su cuerpo en una playa del Condado de Suffolk, donde los restos en descomposición fueron descubiertos por un bañista dos semanas más tarde.
Contreras, de 22, fue condenado a 27 años de prisión; mientras que Espinoza-Merino, de 35, y Rubio, de 30, tendrán que pasar 24 años entre rejas.
“La sentencia de hoy marca el capítulo final en la búsqueda de justicia contra estos tres miembros de la MS-13 que asesinaron brutalmente a un joven como si fuera una ejecución, cuando sospecharon que este era colaborador de las fuerzas policiales”, dijo el fiscal de los Estados Unidos Richard Donoghue. Además, el fiscal añadió: “Esta acusación es parte de una misión en curso de esta Oficina para proteger a los residentes de este distrito de la violencia y la ilegalidad de la MS-13, y no descansaremos hasta que la organización criminal esté totalmente desmantelada”.
Otro de los miembros de la pandilla, Byron López, de 26 años, fue condenado por el mortal disparo a Valverde, pero todavía no ha recibido sentencia.
La multinacional banda callejera —cuyo lema es “Asesinar, violar, controlar”— comenzó en Los Angeles en los años 80, extendiéndose con el tiempo a más de 40 estados con más de 10,000 miembros activos por todo Estados Unidos.
Los vecindarios de Bretnwood y Central Islip han sufrido en los últimos años sangrientos ataques y se cree que los maras son responsables de más de 30 muertes en Long Island, entre 2016 y 2017.
Kayla Cuevas, de 16 años, y su amiga Nisa Mickens, de 15, fueron asesinadas a machetazos por miembros de la MS-13 en Brentwood en 2016. Sus brutales muertes recabaron atención a nivel nacional y trajeron al fiscal general Jeff Sessions hasta Long Island para un encuentro con las familias de las chicas. Además, la madre de Kayla acudió como invitada al Discurso del Estado de la Unión de Trump, quien ha hecho referencias en repetidas ocasiones a la brutalidad de la banda para reafirmar su programa de inmigración.