¿Puede un turista comprar un auto en EE.UU.?
Aquí te decimos las posibilidades que tienes de llevarte un auto a casa cuando viajes como turista a los Estados Unidos
Viajar a los Estados Unidos con el simple objetivo de adquirir un auto es algo más común de lo que nos imaginamos y también muy posible, tanto en el caso de quien quiere comprar un auto barato para realizar un “road trip” por el país, como para aquel que pretende llevarlo a su país de origen.
Para comprar un auto como turista, primero cabe destacar que no existe nada que lo impida, y que las leyes de registro son distintas en cada estado, pero la mayoría requieren que el propietario tenga un título o certificado de propiedad que debe registrarse en el buró de vehículos automotores, papeles que debe darle el vendedor.
Entonces el comprador deberá pagar los derechos de registro, los impuestos de venta y puede comprar placas para el vehículo. Estos oficiales de registro se encuentran en todas las oficinas de los clubes de automóviles, en muchas distribuidoras y en pequeñas oficinas en la mayor parte de pueblos y ciudades. Nunca acepte la venta o cesión de placas de parte de extraños.
Antes de obtener la placa para tu auto, ten en cuenta que se debe tener un seguro de auto, mismo que podría ser complicado de adquirir sin licencia y dirección de un estado americano, aunque la obtención de un seguro temporal podría resolver la situación.
Una vez resuelto esto, el enviar un auto a otro país, en este caso, en el que usted reside, no es algo tan complicado, pues se puede enviar por barco desde un puerto de carga, por ejemplo, a Europa con un costo menor a los $1,000 dólares. Para hacerlo hay que presentar certificado de propiedad y de pago.
Esto se puede evitar si el mismo vendedor es quien lo entrega en el puerto, lo que en muchos estados es considerado como exportación, por lo que queda exento de impuestos estatales.
Esto mismo se puede hacer si se piensa pasar el vehículo conduciéndolo por tierra.
Es importante que antes de comprar el auto verifique que las medidas de seguridad e inspecciones sean compatibles con las de su país, de no hacerlo, podría ser que el vehículo se considerara peligroso y no lo pueda utilizar.