A los 81 años, descubrió su verdadera vocación… y no creerás a lo que se dedica
Y no solo eso, donó $1 millón de dólares para dicha causa
Louis Mapp es un hombre de 81 años, que radica en Mobile, Alabama, y quien desde hace un año realiza un trabajo que lo llena de muchas satisfacciones, pero que también hace la diferencia para que un recién nacido viva o muera.
Un día, mientras se encontraba en casa viendo la televisión, Louis vio un reportaje de una televisora local acerca del trabajo que realizan las enfermeras y algunos voluntarios en las salas de en la sala de cuidados intensivos neonatales (NICU, por sus siglas en inglés).
Fue entonces cuando en él surgieron las ganas de unirse a dicha labor y acudió al hospital de maternidad de su localidad, en donde pidió una oportunidad para realizar este trabajo, la cual viene desempeñando hasta el día de hoy a la perfección.
“Tengo 81 años y una de las mejores cosas que he hecho es abrazar a esos preciosos bebés y ayudar alas enfermeras que los cuidan”, comentó Mapp en entrevista para la revista People.
Una vez a la semana, Louis acude al hospital para visitar a los bebés, pese a que esto le implique un viaje de 45 minutos desde su casa, y asegura que está listo en cualquier momento para acudir al auxilio de cualquier enfermera que se lo pida, sin importar en día y la hora.
“Ser capaz de sostenerlos, y verlos sonreír, me da mucha satisfacción… Estoy sentado allí, sosteniendo a stos preciados bebés, y pienso: ‘¿Qué van a ser cuando crezcan? Me imagino todo tipo de cosas”, agregó.
Por si esto fuera poco, recientemente, Louis decidió donar $1 millón de dólares al hospital para que tengan un fondo que les sirva para comprar equipo médico de última tecnología y para que niños de escasos recursos puedan ser atendidos en este lugar.