Frank Lampard y la banda de los caballos cansados

La MLS debe desterrar de una vez el hábito de contratar a jugadores acabados que sólo buscan un puñado de dólares

Se va Frank Lampard del NYCFC. Se lleva doce millones dólares en dos años y no le deja nada al fútbol de Estados Unidos.

Una historia amargamente repetida que cuenta del desfile de grandes nombres cargados de triunfos -y de años- que pasan con más pena que gloria y luego sólo dejan frustración. Uno de esos es Lampard.

Tras un primer año (2015) en el que apenas pudo contarse con él como jugador del equipo el exinternacional inglés debutó en el mes de agosto y dejó un pobre aporte de diez partidos y tres goles.

El NYC FC debutante en la MLS bajo la tutela de Jason Kreis, moría de todas las carencias mientras Lampard (tras dejar el Chelsea) que había jugado toda la temporada con el Manchester City de Pellegrini estaba de vacaciones en Francia.

Cuando finalmente llegó a Nueva York, y debutó el 2 de agosto, fue recibido con silbidos de los inexpertos fanáticos neoyorquinos que entienden a su manera que un jugador franquicia debe estar en la línea de batalla acaso con más compromiso que los demás.

El City quedó fuera de los PlayOffs, pero con el liderazgo de un gran David Villa y la llegada de Andrea Pirlo y por supuesto contando con Lampard, armaron un nuevo proyecto con Patrick Vieira al frente.

“Es un privilegio contar con estos hombres… ganadores de todo. Y sólo espero que con mucho trabajo seamos un buen equipo de fútbol”, dijo Vieira en entrevista con El Diario.

Luego cuando Lampard empezó la temporada lesionado se apuró a explicarlo: “No ha tenido suerte, pero pronto contaremos con él… No es una lesión grave y le daremos tiempo para que recupere”.

Su primera aparición fue el 21 de mayo, ante Red Bulls el día que perdieron 7-0 en su patio. Pero pasaron la página.

Y sí, Lampard se recuperó, jugó y brilló. En lo futbolístico está claro que pocos han exhibido la combinación de potencia física, temperamento y recursos técnicos que tuvo exjugador del Chelsea.

Pocos podían cambiar tanto a un equipo como Frank Lampard quien llegó a ilusionar a los seguidores que casi olvidaban sus horribles habito de lesionarse y desaparecer largamente, cuando este verano fue capaz de anotar 12 goles en 19 partidos.

Con Lampard apto para jugar, más que eso, jugando y anotando goles el NYC FC llegó a la punta de la Conferencia del Este y a falta de tres fechas para el cierre de la temporada regular se engancharon a los Playoffs.

Lo más reciente dice que el City fue apeado de la postemporada por el Toronto FC y que Lampard con acción en ambos partidos no pesó para cambiar la historia.

La realidad es que el volante inglés a los 38 años ya no tiene piernas, ni ganas. Después de 874 partidos en varios torneos y 106 con la selección inglesa ya no le queda nada en el tanque.

Por eso los 29 partidos con el NYC FC llegan a ser un dato estadístico aunque también son una manera de irse por la puerta de atrás.

Lampard hace parte de esa banda de caballos cansados como se ha definido a esos grandes nombres que luego no le dan nada al fútbol.

Nombres como Lotthar Matthaus, Denilson, Marcelo Gallardo, Rafa Márquez, Branco y un largo etc. son sólo una muestra de grandes fracasos de estrellas de otro tiempo que no pudieron en la MLS.

Que Frank Lampard es el peor fichaje del NYC FC ya no quedan dudas.

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