David Ortiz a personal médico en República Dominicana: “Por favor, no me dejen morir. Soy un buen hombre”
En medio de la emergencia, el expelotero de los Medias Rojas clamó por su vida
Mientras era trasladado a un hospital en Santo Domingo, República Dominicana, el expelotero de los Medias Rojas, David Ortiz, pidió que no lo dejaran morir.
“Por favor, no me dejen morir. Soy un buen hombre”, clamó el apodado “Big Papi” a personal médico en plena sala de emergencias luego de haber sido baleado por la espalda en el club Dial el domingo.
Uno de los doctores que atendió a la leyenda de las Grandes Ligas en la clínica ofreció el detalle, según citado por el New York Times.
El reporte del NYT también destaca que la noche del incidente, Ortiz no pensaba salir. Sin embargo, decidió acudir al lugar a raíz de una llamada de Jhoel López, un animador de televisión en Dominicana. López también resultó herido, pero se encuentra estable.
“Simplemente salimos y seguimos nuestro camino”, dijo, por su parte, Eloy, hermano de Ortiz. “Esto no hace sentido”, agregó.
El expelotero había viajado a RD para promover una marca de cigarillos y para realizar labores con una fundación para suministar equipo deportivo a niños.
Adicional, el dominicano aprovechó la visita para entrenar con su hijo D’Angelo, de 15 años, quien quiere seguir los pasos de su padre a las Grandes Ligas.
La esposa de Ortiz, Tiffany dijo, en un comunicado de prensa este martes, que su pareja salió bien de la segunda cirugía que se le realizó.
“David llegó al Hospital General de Massachusetts anoche y se sometió a una segunda cirugía exitosa. Está estable, despierto y descansando cómodamente en la UCI, donde se espera que permanezca durante los próximos días”, lee el parte de prensa.
El dominicano fue trasladado desde RD a Boston, hogar del equipo que representó, este lunes para continuar su tratamiento.
La mujer que procreó tres hijos con Ortiz, además, pidió privacidad hasta tanto Big Papi se recupere totalmente.
Reportes extraoficiales que circulan desde este lunes en medios locales e internacionales apuntan a que un narco habría mandado a matar al expelotero por mantener una relación extramarital con su esposa.
Las autoridades aún no han establecido el móvil del crimen.