Policía apuntó a vicepresidente de NY Yankees al confundirlo con ladrón de su propio auto
Negligencia y confusión en Nueva York y Connecticut
Brian Cashman, vicepresidente y gerente general de los NY Yankees, fue invadido por un grupo de agentes de la policía de Connecticut que lo apuntaron con armas de fuego cuando aparentemente fue confundido con un ladrón de autos armado el viernes.
El ejecutivo beisbolero de 52 años conducía su Jeep Wrangler blanco desde el Yankee Stadium a Connecticut después de que se reportó que fue robado el sábado pasado, según fuentes policiales.
La policía de Nueva York encontró su vehículo abandonado en El Bronx (NY) y se lo devolvió a principios de esta semana.
Cashman intentaba llegar al Departamento de Policía de Norwalk (CT) para que procesaran su automóvil como evidencia el viernes y se detuvo en una estación de servicio en Darien. “Fue entonces cuando aparentemente las circunstancias cambiaron radicalmente”, dijo Cashman a New York Post.
“Tuve un comité de bienvenida que descendió sobre mí cuando salí de esa estación de servicio”.
Según Cashman, los policías de Darien ya estaban “respondiendo a alguien en un Jeep blanco que blandía una pistola en el consultorio de un médico local”.
Para empeorar las cosas, cuando la policía de Darien procesó las placas de Cashman, el vehículo aparecía “robado” porque “la policía de Nueva York nunca me sacó de la lista”, dijo.
Al salir de la estación de servicio, cinco coches patrulla se concentraron en Cashman y entre seis y nueve oficiales salieron de sus autos con sus “armas desenfundadas”, detalló.
“Ejecutaron una intercepción muy discreta”, dijo Cashman. “Son claramente muy profesionales y entrenados y me pidieron que apagara mi auto, saliera del vehículo, caminara hacia ellos… estaban cumpliendo con su deber”.
Cashman agregó que le dijeron que “no hiciera ningún movimiento precipitado” al salir de su Jeep. “Registraron mi auto, me pidieron mi identificación (…) Les expliqué lo que estaba pasando”.
Dijo que la dramática prueba tardó aproximadamente 15 minutos antes de que regresara en su automóvil y lo escoltaran al Departamento de Policía de Norwalk.
Cashman dijo que había algo positivo en su experiencia salvaje. “El público debe alentarse… cuando alguien está en un vehículo robado no va a llegar muy lejos”.
“Tengo un gran respeto por todas las fuerzas del orden. Hacen un trabajo increíble tanto si se encuentra en Connecticut como en la ciudad de Nueva York, y a veces pueden ocurrir circunstancias únicas”.
