Networking, una cuestión de confianza

La clave es formar relaciones duraderas

No te quedes en casa, sal.

No te quedes en casa, sal. Crédito: Cortesía

Construir una red de contactos que generen oportunidades de negocio es imprescindible para crecer profesionalmente, pero conviene tener presente que el networking valioso y duradero solo es posible cuando se tiene un apropiado manejo de las habilidades emocionales.

Los datos del Centro de Investigaciones Sociológicas de España revelan que casi la mitad de las personas (el 45,4 %) consiguen su empleo mediante contactos, a través de familiares, amigos, conocidos…

El comportamiento no es igual en todos los sectores ni para todos los puestos, pero estas cifras nos dicen que somos más receptivos a lo que nos diga una persona de confianza que a lo que dicte cualquier algoritmo.

Resulta curioso comprobar que, en un mundo tan competitivo, lleno de headhunters, empresas de recursos humanos y redes sociales, la recomendación personal se lleva el papel protagonista. Esto es así porque la inmensa mayoría de nuestras decisiones están determinadas por las emociones.

Hay algo con lo que disfruto especialmente y es cuando presento a personas que no se conocen, las veo confiar una en la otra y decidir que van a emprender algo juntos. Eso ocurre en el MasterMind Latino, y sé que se debe a la correcta gestión de estas habilidades. En mi opinión, el triunfo del networking aquí es posible por varios motivos:

La confianza. Es el primer paso para hacer negocios. Las personas exitosas no actúan con desconfianza; primero porque genera inseguridad, y segundo porque confiar es la mejor forma de hacer que confíen en nosotros. La sociedad que queremos está basada en relaciones de confianza: confiamos en nuestra familia, en nuestra pareja, en nuestros amigos, en la empresa, en los médicos, en la policía, en los bancos… El mundo está lleno de buena gente; las excepciones son pocas.

El manejo de las habilidades psicológicas. Reconocer la formación y sabiduría de los demás, tener seguridad para tomar decisiones, aparcar los egos, ser generosos y vencer los temores; es decir, alcanzar el bienestar.

La reciprocidad. Con independencia de las creencias de cada uno, hay un pasaje del Evangelio de San Mateo que debería regir nuestras vidas; no se trata de religión, sino de sentido común y justicia social: es ese texto que habla de «tuve hambre y me disteis de comer…». Tratar a los demás con cariño, escuchar, conectar de verdad, transmitir bondad, experimentar empatía o ser agradecidos son emociones necesarias para emprender negocios con éxito. Nadie quiere embarcarse con su enemigo; todos preferimos un compañero de viaje aliado.

El verdadero interés. Hacer networking no significa adular a alguien importante. El verdadero interés debe estar en la persona, y no en el cargo. El logro de cualquier evento empresarial no es firmar contratos comerciales, sino forjar relaciones duraderas, establecer vínculos emocionales y crecer juntos profesionalmente.

http://www.ieieamerica.com/

En esta nota

networking

Recibe gratis todas las noticias en tu correo

Este sitio está protegido por reCAPTCHA y Google Política de privacidad y Se aplican las Condiciones de servicio.

¡Muchas gracias! Ya estás suscrito a nuestro newsletter

Más sobre este tema
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain