Las veces que Francis Suárez, el alcalde de Miami, ha incumplido la ley para irse de fiesta en plena crisis del coronavirus

Julián Gil junto al alcalde de la ciudad de Miami, Francis Suárez, tras conocer la decisión de la Comisión de la ciudad.

Julián Gil junto al alcalde de la ciudad de Miami, Francis Suárez, tras conocer la decisión de la Comisión de la ciudad. Crédito: Julián Gil | Cortesía

El alcalde de la ciudad de Miami, Francis Suárez, no se ha cansado de repetir una y otra vez que hay que respetar las normas de distanciamiento social y todas las medidas implementadas por las autoridades.

Pero él es el primero que, aprovechando su autoridad, incumple las leyes. No han sido una ni dos veces. Por lo menos en tres ocasiones el alcalde ha participado en eventos ilegales durante la crisis del coronavirus.

La primera ocasión tuvo lugar el 17 de abril en una piscina de un condominio, que debía estar cerrada por orden del condado de Miami-Dade. En ese momento, el político acababa de recuperarse del coronavirus y la cifra de fallecidos continuaba subiendo.

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Fue a la fiesta organizada por World Red Eye junto a algunos empresarios de los clubs más famosos del sur de la Florida. Representantes de los Miami Marlins, el empresario David Grutman o los DJs Cedric Gervais y DJ Irie amenizaron la velada en la zona de la piscina del recinto Amara at Paraiso.

El alcalde del condado de Miami-Dade, Carlos Giménez, había ordenado el cierre total de las piscinas de los condominios. Sin embargo, parece que Francis Suárez hizo oídos sordos a esta orden condal y se animó a participar de la fiesta.

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Aunque él no subió ninguna fotografía a sus redes sociales, algunos de los asistentes sí que lo hicieron. En las imágenes, se ve al representante político de la ciudad de Miami incumpliendo la distancia social y chocando manos.

Con la excusa de recaudar dinero para fabricar solamente 10,000 mascarillas, Francis Suárez y otros funcionarios de salud disfrutaron de una fiesta con música alta y animando a la gente a salir a los balcones hasta altas horas de la noche.

La segunda y la tercera vez fue en el restaurante y bar “Swan”, propietario de David Grutman (el mismo que había organizado la fiesta ilegal en el bar). Según dio a conocer Univision, el político tampoco se perdió la fiesta “Jueves de pasarela” y acudió acompañado por oficiales de policía.

De acuerdo a las imágenes que circularon en internet, en esa fiesta no se estaba cumpliendo con las normas de no superar el 50 por ciento del aforo total y tampoco se respetaba con la distancia social.

Esta semana, el alcalde lamentaba que la gente no estaba cumpliendo con las normas y avisaba que endurecería las medidas si la gente no respetaba la ley.

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