Reacciones de la comunidad de Chicago al video de la muerte de Adam Toledo a manos de un policía
El oficial Eric Stillman fue puesto en labores administrativas por 30 días mientras la Oficina Civil de Responsabilidad Policial investiga el tiroteo
A casi un mes de la muerte de Adam Toledo, de 13 años, a manos de un oficial de Policía de Chicago, la comunidad no ha cesado de manifestarse en marchas, mítines y vigilias en memoria del menor y transmitiendo un claro mensaje: exigen justicia.
Toledo recibió un tiro letal de parte de un policía en un callejón de La Villita pese a que el menor tenía las brazos en alto y en ese momento no tenía un arma en las manos.
Pero también hay algunos residentes de Chicago que no comulgan con la idea de manifestarse en contra de la policía, alegando que los oficiales protegen a la comunidad del accionar de pandilleros. Otros creen que los padres del menor debieron haber evitado que Toledo estuviera en la calle durante la madrugada y otros señalan a Rubén Román, de 21 años, quien según los fiscales estaba con Toledo la noche del 29 de marzo en que un policía le disparó al menor.
Román, quien fue arrestado durante ese incidente, salió en libertad bajo fianza el lunes 19 de abril por la noche.
La organización Chicago Community Bond Fund otorgó $4 millones para cubrir la fianza de más de 650 personas que carecen de los recursos para pagarla por sí mismos. Román fue uno de los últimos destinatarios y recibió $40,000, con los que logró salir de la cárcel, informó la televisora CBS 2.
Román está en libertad bajo fianza y con monitoreo electrónico en casa. Enfrenta delitos graves que incluyen poner en peligro a un menor y resistirse al arresto.
“Tomamos la decisión de pagar una fianza para el Sr. Román porque somos conscientes de que la ciudad continuará usándolo como chivo expiatorio por el asesinato de Adam Toledo, que fue cometido por el Departamento de Policía de Chicago”, dijo a CBS 2 Keisa Reynolds, quien actualmente dirige Chicago Community Bond Fund.
Tras la revelación del video mortal de la policía contra Toledo también se hicieron públicos informes que identificaban al oficial que le disparó al menor en el pecho el 29 de marzo. Se trata de Eric Stillman de 34 años, oficial que desde agosto de 2015 fue asignado al décimo distrito.
Un abogado de Stillman dijo en un comunicado que el oficial se enfrentó “a una situación de fuerza letal y que amenazaba su vida” en la que “no tenía otra opción”.
Stillman ha sido puesto en labores administrativas durante 30 días de acuerdo con la política del Departamento de Policía de Chicago y mientras la Oficina Civil de Responsabilidad Policial (COPA) investiga el tiroteo.
Un grupo de líderes comunitarios latinos y abogados pidió que el Departamento de Justicia investigue el tiroteo mortal que cobró la vida del Toledo.
También se pidió este martes 20 de abril a la alcaldesa de Chicago, Lori Lightfoot, que acelere los cambios supervisados por la corte en la vigilancia policial en Chicago, ponga fin a las persecuciones a pie de oficiales e invierta recursos de ayuda federal para ayudar a los jóvenes de La Villita, vecindario donde Adam Toledo vivió y murió.
Entre los grupos que pidieron cambios el martes figuran Hispanic Lawyers Association of Illinois y Pilsen Law Center, por mencionar algunos.
Habla la comunidad
Katya Nuques, directora ejecutiva de la organización comunitaria Enlace Chicago de La Villita, dijo que la comunidad está extremadamente enojada y decepcionada de lo que no se ha hecho, decepcionada de que un niño de 13 años, un niño de color, haya muerto a manos de la policía y de que se ha estado tantos años hablando y hablando de los planes de reformar el Departamento de Policía de Chicago pero es poco lo que se ha hecho.
“Hay una serie de ordenanzas en la mesa, hay una serie de planes, pero no nos hemos movido a la velocidad que deberíamos movernos, porque nosotros como comunidad, como sociedad, tenemos que hacer las cosas que son prioridad, tenemos que hacerlas con urgencia”, dijo Nuques. Y agregó que sobre la violencia en las calles se debe trabajar urgentemente al igual que en lo relacionado a la brutalidad policial, ya que según ella son de los factores que más afectan a la ciudad por lo que deben ir de la mano los esfuerzos.
Elizabeth Espinosa, madre de dos hijos de 11 y 17 años, reside en el área norte de Chicago. Ella expresó su solidaridad con la familia de Toledo, pero dijo no estar de acuerdo con las manifestaciones que están realizando en contra de la Policía de Chicago. Espinosa considera que lo que debería haber es una manifestación en contra de las pandillas. “Porque si bien es cierto este muchacho es víctima, es víctima de los padres y del sistema… No logro comprender cómo a esa hora ese niño estaba en las calles”.
“Deberíamos enfocarnos en manifestarnos pero en contra de las ‘gangas’, en contra de que no haya más crimen aquí en Chicago, en contra de la venta de armas. Estoy totalmente en desacuerdo que estén en contra de la policía”, reiteró Espinosa a La Raza.
“La pregunta que nos deberíamos hacer es qué sigue, qué mensaje nos deja esta tragedia”, dijo Alberto Lira, residente del área sur de Chicago refiriéndose a la muerte del menor de 13 años. “Vemos a concejales, vemos a políticos, vemos a activistas manifestándose. Está bien, pero ellos son el puente entre la sociedad y las normas de gobierno, ellos son nuestra voz y pienso que es momento de que se tomen cartas en el asunto para reformar y educar a la policía en estos temas”.
Eddie Bocanegra, expandillero, ha trabajado en varias organizaciones para prevenir la violencia en las calles de Chicago. Actualmente es director del programa antiviolencia READI Chicago de Heartland Alliance.
Para Bocanegra, la muerte de Adam Toledo es una tragedia. Dice que se quiere culpar rápidamente a otros por lo que sucedió, pero en realidad toda la sociedad tiene culpa. “Nos apresuramos a culpar a la madre, a la policía, al sistema, a los políticos e incluso a la víctima. Lo que deberíamos preguntarnos es por qué no hicimos más por Adam y por todos los jóvenes que han sido dañados o han dañado a otros… ¿Por qué esperar hasta después de que le quiten la vida a alguien?”, se pregunta Bocanegra.
Bocanegra, quien se ha dedicado por mucho tiempo a trabajar con jóvenes para prevenir la violencia, cuenta que muchas familias en la comunidad luchan para llegar a fin de mes. Y que debido a ello muchos padres limitan la cantidad de opciones que tienen para dar la mejor atención a los hijos. “Los niños también están tratando de encontrar su camino en la vida. Y cuando somos jóvenes tendemos a cometer los mayores errores de la vida. Cuando somos jóvenes buscamos la aceptación, pertenecer a algo más grande que uno mismo. No todos ven el mundo a través del mismo lente que otros lo ven, especialmente los jóvenes”.
Cuando se le preguntó qué piensa sobre quitar fondos a la policía y si cree que debe haber una reforma en la regulación de las armas, Bocanegra respondió: “Tenemos un gran problema en lo que respecta a la confianza entre la comunidad y la policía. A menudo buscamos a la policía para ayudar a resolver todos los problemas de nuestra comunidad, pero ese no es su trabajo. La seguridad pública tampoco es sólo un problema policial, es un problema en el que todos debemos participar. Está claro que la policía por sí sola no puede resolver todo lo que está sucediendo. Necesitamos otras formas de servicios de prevención e intervención. Necesitamos que la gente sienta que la seguridad pública es una responsabilidad de todos nosotros. Eso también significa que la Alcaldesa debe reconocer eso y poner los recursos adecuados para hacerlo. Con una tasa de aprobación de homicidios de menos del 10%, está claro que la policía necesita ayuda”.
—
La cobertura editorial de La Raza es posible en parte gracias al Chicago Community Trust, la Field Foundation of Illinois y el Lenfest Institute for Journalism/Facebook Journalism Project. Agradecemos su apoyo a nuestro trabajo periodístico.