Roxana García dispuesta a ayudar a salvarle la vida a los niños con cáncer de St. Jude: ‘Quiero un final feliz’
"Es tan importante que la gente entienda que con ese poquito de dinero pude ayudar tanto, y dar un final feliz de un niño que se lo merece"
Como cada año, este próximo 6 y 7 de abril las estaciones de radio de Univision de todo el país y Puerto Rico se unen a St Jude Children’s Research Hospital en el llamado ‘Promesa y Esperanza’, con el fin de recaudar fondos para seguir salvando la vida de miles de niños con cáncer.
Durante el evento, se les pedirá a los oyentes de las estaciones de Univision Radio de 16 ciudades de Estados Unidos y Puerto Rico que se conviertan en ‘Ángeles de Esperanza’ comprometiéndose a donar 20 dólares por mes, llamando al 1-800-998-8432 o visitando promesayesperanza.org. El evento radial ‘Promesa y Esperanza’ de St. Jude contará con el apoyo de varias plataformas de Univision Communications Inc., con más de 30 horas de programación radial.
En exclusiva hablamos con Roxana García, la locutora de ‘Tardes Calientes’ -el show de mayor rating radial en Miami- quien colabora con esta causa desde hace años, formará parte de este evento desde su programa, y quien además ha tenido la oportunidad de visitar la sede de St Jude en Memphis, para que nos cuente cómo se prepara.
“Cuando hacemos un radiomaratón nos conmueve que ayuda más la gente que no tiene que la gente que tiene. Es lindo ver como nosotros tratamos de mover el corazoncito de la gente hablando de lo bendecido que somos que tenemos hijos sanos. Con José Antonio -su compañero de radio- hemos estado en Memphis, y hemos sido parte de lo que hace el hospital St Jude, y sabemos lo que hacen paso a paso, sabemos del sufrimiento de la familia, cómo son ayudadas sin ni siquiera tener que colaborar con un peso”.
Pregunta: Después de tantos años colaborando con St Jude, ¿cómo podrías definir la evolución que ha tenido?
Roxana García: Yo creo que la evolución se ve en la carita de los niños, ellos vienen año tras año a la emisora, y regresan sanos, ya en una etapa donde están saliendo del cáncer, eso es lo máximo y le comentas a la gente que te escucha que cada centavo vale la pena, porque están curando, tratando de curar, ayudando a la familia, que aunque pasa por dolores y angustias, esa es la evolución, el resultado positivo cuando hay vida, cura, sobrevivientes, y niños que salen adelante y que los ves tal vez amputados pero libre de cáncer.
P: ¿Cómo se ha comportado el público año a año con su colaboración?
RG: Una vez que ya están con St Jude no se va, hay mucha gente que trata de hacerlo mensualmente. Por más de que la economía no es fácil yo creo que la credibilidad que tiene la fundación es una de las más fuertes que hay en nuestra ciudad.
P: ¿Cómo puede hacer para colaborar la gente que todavía no conoce la causa?
RG: ¿Quién no se conmueve con la historia de un niño? ¿quién no quiere colaborar cuando la ayuda es real? Pero nosotros usamos dos días de la radio para poder dedicarnos al radiomaratón. Es difícil porque la gente cuando escucha las noticias escucha algo negativo, nosotros traemos una realidad tan cruel como es la enfermedad de un niño, que también es muy fuerte, por eso es importante que nosotros variemos, que le veamos el aspecto positivo a esta enfermedad, que sí tenemos que escuchar lo que realmente los niños pasan, las madres pasan para ponernos en su lugar, pero al mismo tiempo tratamos que no sea la angustia de escuchar pero si lo pones con la realidad positiva de lo que hace St Jude todo cambia, queremos un final feliz, esa es la perspectiva, mostrar que gracias a la gente que coopera salva de verdad vida.
P: En lo profesional y en lo personal, cada vez que comienzas y terminas estas radiomaratones, ¿qué piensas y sientes?
RG: Un agradecimiento a Dios porque yo tengo dos niñas, una de 9 y otra de 7 años, y pienso solamente en lo que puede pasar a tus hijos y todo cambia, solamente pensar en el sufrimiento de un inocente todo cambia. Yo me tengo que preparar. Cuando fui a Memphis fue devastador, pero al mismo tiempo uno permanece agradecido por todo lo que uno tiene, por la salud de tus hijos, lo veo por el agradecimiento de las cosas que me pasan a mí, y como uno como comunicador puede ayudar a estas familias, pero sí es muy fuerte.
P: Cuando tuviste la oportunidad de conocer el hospital y la labor de St Jude en su sede que es en Memphis, ¿qué te sorprendió?
RG: Es como un Disneyland, es algo que te llena en toda esa angustia que pueden las familias estar viviendo, estás en un paraíso, y lo más importante es que ellos saben que están en el lugar indicado, y que no puede haber otro lugar en donde puedan hacer por tu hijo lo máximo. El positivismo que todo el mundo los recibe, los colores que tiene el lugar. Ellos están fuera de su espacio y eso angustia también, y St Jude te ofrece eso: un hogar fuera de tu hogar, a pesar de que estés pasando por todo eso que puedas sentirte como en casa, a pesar que uno pueda llevar la cruz por dentro.
P: ¿Qué le dices a las personas que pueden tener la posibilidad de colaborar este próximo 6 y 7 de abril?
RG: Que uno se gasta 10 o 20 dólares en tonterías, en cosa que no utilizamos, y que con ese dinero definitivamente podemos estar salvando la vida de un niño, el dinero viene y va, pero la salud no. Es tan importante que la gente entienda que con ese poquito de dinero pude ayudar tanto, y dar un final feliz. Son parte de un final feliz de un niño que se lo merece.