Una mala jugada lo sacó del futbol pero no del retiro

Apenas habían transcurrido 60 segundos de iniciado el partido cuando Francisco Quintero escuchó el crujir de su pierna derecha. Estaba a punto de disparar a gol cuando un defensa lo golpeó por atrás y le fracturó la tibia y el peroné.

“Solo sentí cuando le pegan a uno y se quiebra la espinillera, así se oyó el golpe, mi pie se quebró y ya no me pude parar”, recordó Francisco de aquel partido hace dos meses con su equipo Artilleros en la Liga 5 de Mayo.

Agobiado por los gastos que se le acumulan y el dolor, Francisco no pierde la esperanza y se motiva acudiendo cada domingo a ver jugar a sus compañeros que no lo han abandonado.

Francisco se quedó sin empleo y entre todos han cooperado para sus gastos más importantes, como alimentos y renta de su casa.

“No tengo familia, y solo mis amigos que me ayudan”, agradeció.

¿Qué es lo que sigue? “Esperar en Dios a que me recupere para poder trabajar”.

Al momento de la entrevista Francisco había visitado al doctor tres veces. Le tuvieron que acomodar un hueso y por suerte no requiere de cirugía.

Consejo a los jugadores: “Jugar es bonito, me encanta jugar, pero yo quisiera que tuvieran cuidado en no lastimar a los demás”, pidió el futbolista.

¿Piensas volver a jugar? “Pienso que tal vez sí, pero lo primero es tratar de recuperarme para poder trabajar”. La Liga 5 de Mayo ha colocado una caja en el Sherman Park para recaudar dinero todos los domingos para el jugador y las donaciones son bienvenidas.

Francisco hizo un llamado: “Que jueguen limpio y que no lastimen a los demás”.