Critican que indocumentados siguen en las sombras mientras recién llegados reciben permisos de trabajo
Activistas e inmigrantes exigen a Biden que conceda a todos los indocumentados la autorización para trabajar, pues muchos llevan décadas sin haber recibido ninguna ayuda
El pasado 12 de octubre, día en que se celebra el Dia de los Pueblos Originarios, antes conocido como el Dia de la Raza, llevaron a la placita del Zócalo en Pilsen en un día lluvioso cerca de 200 personas para reclamar al país y al presidente Joseph Biden la larga espera de varias décadas de la comunidad inmigrante sin una reforma migratoria que incluya el anhelado permiso para trabajar y la protección que lleva ser un residente permanente.
Los asistentes a esta demostración apuntaron al hecho de que, recientemente, la administración de Biden ha otorgado el Estatus de Protección Temporal (TPS, en inglés,) a cerca de 470,000 inmigrantes venezolanos que buscan asilo político.
La ciudad de Chicago hasta el momento alberga a más de 17,000 inmigrantes de Venezuela desde el año pasado, cuando los gobiernos de Texas y de otros estados empezaron a enviar a esos migrantes en autobuses a las ciudades santuario.
Bajo una llovizna que no cesaba en la placita del Zócalo, en el crucero de las calles 18 y Paulina, en el barrio de Pilsen, la señora Oliva Romero, de 80 años, sostenía un cartelón con una leyenda escrita con las letras de molde que indicaba, en inglés, “señor Biden, los soñadores también necesitan permisos de trabajo”.
Mientras la señora Romero se respaldaba en una puerta de una antigua iglesia, ella contó la frustración palpable de cientos y cientos de inmigrantes mexicanos, incluyendo adultos y jóvenes calificados como Soñadores, que a lo largo de décadas no han recibido nada de las administraciones de Barack Obama, de la del presidente Donald Trump y ahora de la del actual presidente Biden.
“Es una injusticia que les quiten el permiso de trabajo tanto a los jóvenes como a las personas mayores”, apunta Oliva, mientras se cubre el rostro con la pancarta que sostiene en sus manos.
“El resto de la gente ya lleva 16 o más años esperando para que ahora inviertan tanto en la gente que apenas va llegando, no está bien”, señala Romero. “Pienso que los que ya tienen más tiempo aquí tienen más necesidad de trabajar”.
“No es justo dejar a los inmigrantes ya aquí sin trabajo”, destacó Oliva. “Si no va a haber una reforma migratoria, que nos den ya los permisos de trabajo”.
Para terminar, esta mujer inmigrante, que vino de México, reitera que es hora de que la Casa Blanca actúe porque “ya una gente lleva unos 40 años en las sombras y en las fábricas los explotan pagándoles unos $3.25 la hora. Queremos que nos tomen en cuenta”.
En otra parte de la concentración, llevada a cabo por Proyecto Resurrección y otros grupos de la ciudad, Lucila López, de 51 años, dice que acudió desde el suburbio de Elgin, lo que le tomó una hora de viaje, para expresar su enojo contra el presidente Biden y los políticos que no actúan para resolver esta crisis migratoria de ya varios años.
“No nos toman en cuenta”, dice Lucia, mexicana de origen, “ni un partido ni el otro.”
Alberto Contreras, de 41 años y de origen mexicano, en medio de la concentración de manifestantes sostenía un cartelón que clamaba: “Biden, llevo 20 años esperando un permiso de trabajo”.
“¿Hacemos este tipo de reuniones para que nos escuchen, pero no nos escuchan, así que tenemos que seguir peleando y no bajar la guardia”, dijo Contreras, mientras la gente en la placita el Zócalo gritaba, aplaudía y lanzaba consignas como “Sí se puede” y otras que indican “¿Qué queremos? ¡Permisos de trabajo! ¿Cuándo los queremos? ¡Ahora, ahora, ahora!”.
En Chicago, según el Proyecto Resurrección, viven cerca de 180,000 inmigrantes sin documentos, la mayoría de origen mexicano, que están sujetos a ser explotados y mal pagados, a causa en parte de la inercia de la clase política que no ofrece una solución para que los cerca de 11 millones de inmigrantes en todo el país tengan una reforma migratoria y reciban la plena protección de las leyes laborales.
“Ya es tiempo que estos partidos políticos que buscan su reelección se comprometan”, dijo en esta protesta el concejal Byron Sigcho-López.
Sigcho-López recalcó que todos los 11 millones de inmigrantes sin papeles “llevan muchos años de indocumentados en el país y merecen los mismos permisos de trabajo que los nuevos migrantes están recibiendo”.
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