Trump defiende incremento de recursos en defensa para “empezar a ganar de nuevo”

NEWPORT NEWS, VIRGINIA.-  A bordo del portaviones “USS Gerald R. Ford” en el sur de Virginia, el presidente Donald Trump “vendió” este jueves ante miles de marineros su plan para aumentar en un 10% el presupuesto de defensa para “empezar a ganar de nuevo”.

“Vamos a darle a nuestro Ejército las herramientas que ustedes necesitan para prevenir guerras y si se requiere una guerra y hacer una sola cosa, ¿Saben cuál es? Ganar. Vamos a empezar a ganar de nuevo”, prometió Trump, quien fue recibido con una ovación.

“Los barcos americanos surcarán los mares, los aviones americanos remontarán los cielos, los trabajadores americanos construirán nuestras flotillas“, dijo Trump en su discurso salpicado de su habitual nacionalismo en el astillero de Newport News (Virginia), a orillas del Río James.

Trump ha solicitado al Congreso un total de $54,000 millones adicionales para el Pentágono para el año fiscal 2018, lo que, de aprobarse, exigiría recortes por igual cantidad en gastos discrecionales en un amplio abanico de programas sociales.

El recibimiento que obtuvo Trump a bordo del buque de guerra contrastó con la nueva tormenta política que afronta su Administración tras la revelación de que su fiscal general, Jeff Sessions, ocultó al  Senado que sostuvo encuentros privados con el embajador ruso, Sergey Kislyak.

Al hacer un recorrido del buque, Trump dijo a los periodistas que lo acompañan en este viaje que tiene “total” confianza en Sessions, y aunque no estuvo al tanto de los contactos del exsenador con el embajador ruso, cree que éste “probablemente” dijo la verdad en su audiencia de confirmación en el Senado el mes pasado.

Trump no consideró necesario que  Sessions tuviese que retirarse de la investigación que realiza el Departamento de Justicia sobre los contactos que hayan mantenido miembros de su campaña electoral con Rusia el año pasado.

Pero es precisamente lo que, tras presiones políticas, Sessions anunció horas después durante una rueda de prensa en Washington.

 “Territorio Trump”

La tormenta política en Washington que se cierne sobre Sessions y la Administración Trump, a 180 millas del astillero, no pareció importar a las miles de personas que llegaron al portaviones a escuchar al mandatario.

Enfundados con gruesos abrigos por el frío y fuerte viento que hacía espuma las olas del Río James, algunos partidarios de Trump indicaron a este diario que es hora de que Estados Unidos recupere y aumente su poderío militar.

“Me entusiasma oírlo porque necesitamos todo eso para nuestro astillero, que es uno de los principales empleadores en el área. Voté por Trump porque creo que él va a recuperar la grandeza de EEUU”, explicó Suzanne Cassella, residente de Newport News.

Chris Davis, un veterano de guerra de 24 años, dijo que votó por Trump “sin dudarlo” porque “le ha dado un fuerte apoyo al Ejército y lo necesitamos”.

A su lado, el marinero Kevin Wilkes, que lleva cinco años de servicio en la Marina, vino a ver en persona a Trump por primera vez porque “si el Ejército logra más dinero, más dinero me llegará a mi”.

Ronny Combs, un veterano de guerra de 40 años y trabajador del astillero, dijo estar “emocionado” con lo “impresionante” y “bello” del buque, y alabó que Trump quiera “traernos más empleos, para que el astillero se mantenga con vida por muchos años”.

“100,000 toneladas de diplomacia”

El portaviones lleva el nombre del expresidente Gerald R. Ford, quien prestó servicio militar durante la Segunda Guerra Mundial, y es el primero de su tipo diseñado en más de 40 años.

En una de sus paredes se aprecia el letrero “100,000 toneladas de diplomacia, para denotar el “valor diplomático” de la Marina de EEUU en sus misiones para mantener la “paz a través de la fuerza”.

Según datos distribuidos a la prensa por el Pentágono, la nave incluye una planta nuclear con dos reactores y capacidad para generar casi tres veces la cantidad de energía eléctrica, además de que tiene mayor capacidad y rapidez para el lanzamiento de misiones y respuesta a crisis.

Con el exorbitante costo de $12,900 millones –es el más caro de la flota naval-, el portaviones realizará varias pruebas en las próximas semanas antes ser “comisionado”, que en la jerga naval significa entrar formalmente “en activo”.

El portaviones contará con un total de 4,500 marineros, entre ellos decenas de origen hispano, además de 70 portaaviones.

La empresa que fabricó el portaviones, Huntington Ingalls Industries, ha dicho que la Marina de EEUU se ahorrará $4,000 millones en cinco décadas, por concepto de una reducción en las operaciones de mantenimiento.