El Senado impulsa reforma contra el tráfico sexual en sitios web

Durante años los sitios web se han mostrado reacios a los cambios en la ley federal de inmunidad temiendo que una excepción en casos de tráfico sexual suponga una apertura a más limitaciones, pero ahora se encuentran con el Senado trabajan en una legislación en este sentido.

Según publica el Wall Street Journal, las probabilidades de que el Senado consiga aprobar una legislación destinada a frenar el tráfico sexual el línea son cada vez más elevadas, a pesar de los sucesivos esfuerzos de algunas compañías tecnológicas y sus aliados para evitar dichas leyes.

La próxima semana los senadores se reunirán para debatir una medida que ayudaría a fiscales y victimas a denunciar a los sitios web que faciliten el negocio sexual en Internet. La propuesta de ley busca limitar la inmunidad federal con la que cuentan los negocios online.

Una protección que fue adoptada en la década de los noventa cuando Internet comenzaba a crecer y, debido a este privilegio, las demandas por tráfico sexual a los negocios en la web han sido generalmente descartadas.

Ahora, los defensores de esta propuesta de ley afirman que la norma es necesaria para combatir la epidemia que el tráfico sexual en línea, que muchas veces involucra a menores, supone en la sociedad.

Mitch McConell, senador del partido republicano con ahora mayoría en el Senado, sometió por primera vez a debate esta legislación la pasada semana y el cambio podría llegar este mismo martes. La Cámara aprobó con amplia mayoría agregar una enmienda que crea una excepción a la regla de inmunidad que protege a las tecnológicas.

Esta industria se acerca a la legislación con precaución, ya que muchas empresas no quieren oponerse públicamente a esta medida destinada a frenar el tráfico sexual. Al mismo tiempo ven que la ley de inmunidad es un pilar legal de internet y temen que su eliminación les lleve a costosos juicios y termine con la protección que durante los últimos años ha ayudado a Internet a crecer.

Así, la intención del Senado de poner límites y excepciones deja a esta industria generalmente unida en asuntos políticos, divida entre en tácticas y enviando mensajes contradictorios sobre su posición.

Como ejemplo se encuentran grandes tecnológicas como Facebook y Google, que se resistieron a cualquier cambio en le ley de inmunidad por miedo a que una pequeña excepción, en este caso para el tráfico sexual en internet, abra la puerta a otras excepciones de daños que pueda perpetrar la red.