Pritzker defiende a los inmigrantes en una punzante audiencia en el Congreso

La comparecencia de tres gobernadores del país ante un comité del Congreso este jueves 12 de junio en Washington DC fue calificada como “una audiencia hecha para la televisión” por la representante Melanie Stansbury, demócrata de Nuevo México.

Stansbury criticó las recientes acciones del presidente Donald Trump, incluyendo el despliegue de la Guardia Nacional en Los Ángeles, y consideró que la audiencia “hecha para la televisión’ fue organizada para atacar a los tres gobernadores invitados.

Los gobernadores JB Pritzker, de Illinois; Tim Walz, de Minnesota; y Kathy Hochul, de Nueva York, rindieron testimonio frente a los miembros del Comité de Vigilancia y Reforma del Gobierno de la Cámara de Representantes.

Stansbury, científica de profesión, calificó las medidas de Trump, incluyendo el desfile militar de este próximo sábado en la capital del país a un costo de millones de dólares, como “inmoral, ilegal y un abuso del poder.”

Mientras tanto, en su presentación el gobernador Pritzker batalló para que varios vociferantes congresistas republicanos lo dejaran hablar. Casi a cada intento de poner al frente su posición sobre los inmigrantes, los más extremistas de los republicanos lo interrumpían.

Inclusive, el congresista Andy Biggs, republicano de Arizona, casi rebasó los límites de la cordialidad e intentó llevar adelante su postura de que las ciudades y los estados santuario “son ilegales”.

Atrás de Biggs estaban colocados tres cartelones anunciando que “Las ciudades santuario son ilegales”.

En su mensaje inicial, Pritzker habló del origen inmigrante de su familia, defendió el valor de los inmigrantes para Illinois y criticó la actual política antiinmigrante del gobierno federal.

“Como nos lo recuerdan en Los Ángeles esta semana, todos podemos estar de acuerdo que la violencia de todo tipo, a quien sea que vaya dirigida, es inaceptable. Todos deben someterse a la ley. Illinois respeta la ley pero, déjenme dejarlo en claro, esperamos que el gobierno federal también respete la ley”, dijo Pritzker.

“Es equivocado desplegar la Guardia Nacional y marines activos en una ciudad estadounidense con la objeción de las fuerzas de seguridad locales solo para inflamar la situación y crear una crisis, del mismo modo que está mal separar a niños de sus casas y de sus madres y padres, quienes han estado por décadas viviendo y trabajando en nuestras comunidades, criando a sus familias”, añadió Pritzker ante los congresistas.

En esta audiencia, que más parecía un “reality show” republicano, la mayoría de los congresistas republicanos aludieron a varios casos de personas indocumentadas que cometieron homicidios o violaciones.

Pero si los republicanos querían aprender de los tres gobernadores, se perdieron la oportunidad pues casi no los dejaron hablar ya que los interrumpían repetidas veces.

Incluso el representante Clay Higgings, republicano de Luisiana, llamo “presumido” al gobernador Pritzker.

Cuando menos dos congresistas republicanos aparecieron bastante irritados porque en un discurso previo se llamó “agentes Gestapo” a los efectivos de ICE.

Por otro lado, varios de los congresistas demócratas en el comité tomaron la ocasión para defender a los inmigrantes y protestar por las acciones de los agentes de ICE que han estado efectuando redadas en varias ciudades del país.

“Estoy siendo testigo del odio disfrazado del buen gobierno y me espanta el infierno dentro de mí,” dijo el representante Kweisi Mfume, demócrata del estado de Maryland, al ver en la audiencia la falta de diálogo verdadero y muchas posturas antinmigrantes de sus colegas republicanos.

MFume entonces denunció los actos de terror y amenazas contra la gente de color en este país en el pasado.

“Nosotros en este país no somos puros y prístinos y hace 100 años yo no podría hacer muchas cosas bajo las leyes de Jim Crow en el Sur”.

Mfume le recordó a los republicanos que “hay buenos y malos en cada grupo” en el país, incluyendo en los inmigrantes.

Por su parte el gobernador Pritzker sí pudo declarar que Illinois es un estado con niveles bajos de crimen, bueno para los negocios y un lugar de compasión.

Al recibir el estado a cerca de 50,000 inmigrantes enviados a Illinois desde la frontera sur por el gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, Pritzker dijo que fue necesario ayudarlos.

“Tuvimos que asistir a los niños y las familias para que no tuvieran hambre y no se refugiaran a la intemperie en el frío”, dijo Pritzker.

Pritzker agregó con orgullo que Illinois es la casa de 1.9 millones de inmigrantes de varios países que son “trabajadores, crían a sus familias y pagan impuestos”.

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