Vecinos del Bronx denuncian sede de espionaje ruso en la zona
"Nadie sabe qué sucede allí", dicen en relación a un edificio residencial para empleados de Rusia ante la ONU
Un edificio residencial blanco en Riverdale levanta sospechas entre los vecinos del Bronx.
La torre de 20 pisos en 355 West 255th St. es el hogar oficial de cientos de diplomáticos y funcionarios administrativos que trabajan para la Misión Permanente de Rusia ante las Naciones Unidas (ONU) y el Consulado de ese país en Nueva York.
El edificio prefabricado fue construido por la Unión Soviética en 1974. Incluye instalaciones deportivas y una escuela para los niños rusos. Todo rodeado por afiladas rejas de seguridad.
Al otro lado de la calle se encuentra una discreta casa de dos pisos que los residentes creen que funciona como un puesto de mando del FBI, según New York Post.
“Cuando tengo las ventanas abiertas, siento que Big Brother me está mirando”, dijo un residente de 57 años. “También es una monstruosidad real y arruina nuestra vista”.
En plena Guerra Fría, EEUU y la Unión Soviética (URSS) tenían tensas y escasas relaciones. Pero por ser un país miembro de la ONU, Nueva York debía hacer una excepción.
Los constructores y todos los materiales fueron importados de Rusia para minimizar el riesgo de que la inteligencia estadounidense pudiera colocar dispositivos de escucha o sabotear la construcción.
Aunque es un misterio lo que sucede en un lugar al que muchos residentes locales se refieren simplemente como “el complejo”, la mayoría asume que muchos de sus vecinos rusos son espías.
De hecho, apenas se asombraron por el arresto de la supuesta espía rusa María Butina en Washington DC la semana pasada. Lo mismo sucedió con las acusaciones recientes del Departamento de Justicia contra 12 ciudadanos rusos, por la investigación del asesor especial Robert Mueller sobre la intromisión del presidente Vladimir Putin en las presidenciales de 2016.
En marzo pasado, el gobierno de Donald Trump expulsó a 60 rusos en represalia por el envenenamiento de un ex espía ruso en Gran Bretaña. Doce de aquellos forzados a dejar EEUU vivían en Nueva York. Previamente, en diciembre de 2016 el presidente Barack Obama expulsó a 35 supuestos espías rusos en represalia por lo que las agencias de espionaje estadounidenses dijeron que había sido la interferencia de Rusia en las elecciones presidenciales.
Muchos creen que Riverdale ha sido durante mucho tiempo el epicentro de la intriga y el espionaje rusos. El desertor soviético Arkady Shevchenko, ex asesor del Ministerio de Asuntos Exteriores soviético que vivió en el edificio antes de desertar a EEUU en 1978, señaló en su libro “Rompiendo con Moscú” que “el edificio de apartamentos en Riverdale y la misión (están) llenos de antenas para escuchar las conversaciones estadounidenses”.
El FBI no respondió una solicitud de comentarios.
“Las únicas personas a las que se les ha permitido ingresar son la policía, los bomberos y los recolectores de basura”, dijo Beth Zakar, una diseñadora de joyas que vive al otro lado de la calle del complejo diplomático ruso.
En 2015 el FBI arrestó a Evgeny Buryakov, un ruso que vivía a unas cuadras de la torre rusa en Riverdale. Fue acusado de tratar de reclutar estadounidenses comunes para ayudarlo a conducir espionaje. Se comunicaba con el “centro de Moscú” a través de los códigos de “una oficina segura” en Manhattan, según documentos judiciales.
Buryakov, cuyo nombre en clave era “Zhenya”, formaba parte de un trío de élite de agentes de alto nivel con sede en Nueva York. Fue deportado después de declararse culpable de trabajar como agente secreto en Rusia.
“Nadie sabe qué sucede allí”, dijo Jane Reeder, una psicoterapeuta que ha vivido cerca del complejo ruso durante 32 años. “Pasan junto a ti en la calle y nunca hay un reconocimiento de que eres una persona”.