Vestir al estilo norteño es una moda que traspasa fronteras

Chicago.-En la Mueblería y Discoteca Cortés Ibáñez, que se ubica en el vecindario de La Villita, aparte de camas y mesas lo que más salta a la vista son los singulares sombreros, botas y cintos que se venden en ese establecimiento.

Jesús Cortés Ibáñez, propietario del negocio, dijo que estas prendas son estilos tradicionales, conocidos como vaquero o norteño, y que son muy usados por quienes les gusta esa moda en los estados mexicanos de Sinaloa, Coahuila, Chihuahua, Zacatecas, Tamaulipas, Nuevo León, Jalisco, Michoacán y Guanajuato, por mencionar algunos. Y, desde luego, en Chicago.

Este jalisciense destacó que aunque ese vestir es popular en dichos lugares, no todos siguen la moda vaquera o norteña. “A quienes les gusta, traen la moda de allá hacia Estados Unidos”.

Cortés Ibáñez, mencionó que vestirse de vaquero puede resultar más caro que comprarse un traje de saco y corbata. “Con lo que paga sólo por un par de botas, fácil se compra dos trajes de vestir”, contó.

Este comerciante tuvo una cadena de 15 tiendas y estuvo dedicado al negocio por 43 años en Chicago y ahora que está semiretirado, a sus 69 años, dijo que sólo mantiene operando la tienda de La Villita.

Él comentó ejemplos de lo que puede costar vestirse al estilo vaquero.

Las botas, dijo Cortés Ibáñez, pueden ser de diferentes calidades y modelos. Las hay de pieles de cocodrilo, de avestruz, y de tiburón y llegan a costar entre $500 a $600. Y las hay más caras.

“Nosotros vendemos botas de Guanajuato, que es la capital del calzado en México, pero nuestra línea es la económica, la cual puede costar entre $100 a $150 el par de botas”.

Este empresario también mencionó que los cintos piteados (tejidos) son caros: un cinto de regular precio vale alrededor de $100 y los de mayor costo pueden oscilar entre $300 a $500. Y cuestan más si las hebillas son hechas de oro o de plata.

También hay sombreros tradicionales y texanas que pueden llegar a costar entre $500 a $1,000, y en la línea económica $90.

Cortés Ibáñez dice que en septiembre es cuando se tiene que aprovechar para vender esa mercadería “porque es el mes en que se celebran las fiestas patrias y es cuando más aumentan las ventas”.

La mueblería está en el sótano y allí también se venden cassettes, CD y videos, entre otras cosas.

El zacatecano Octavio Blanco, de 37 años, mostró a La Raza con orgullo la corona que ganó en un concurso de vaquero que se llevó a cabo este año, en el suburbio de Berwyn.

La tienda de Blanco lleva el nombre de ‘El Potrillo’, apelativo que le decían a él de niño. El negocio se ubica en plena calle 18, cerca la estación de tren de la línea Rosa, en el barrio de Pilsen. En ese negocio se vende ropa vaquera y también ropa para quinceañera y accesorios para dama, entre otras cosas que pueden pedirse por catálogo.

“Algunas de las prendas que tenemos las confeccionamos a la medida para cualquier persona que lo solicite y otras se traen de California o de México, como los trajes para los músicos de bandas locales”, dijo Blanco, quien destacó que el vestirse de vaquero no pasa de moda y que es un gusto que cautiva a jóvenes y adultos.

Este comerciante sabe colocar adornos y pedrería a las camisas, sacos y sombreros. “Colocó las aplicaciones a mano, algunas son pegadas, otras cosidas, busco elaborar diferentes diseños y estilos que nadie más los tenga”.

Según Blanco, el vestir como vaquero o norteño es un mexicano que se puede lucir en un matrimonio, una quinceañera y hasta para un baile de banda, duranguense y jaripeo.

“Mientras sepas combinar la ropa, puedes usar la vestimenta de vaquero a donde vayas”. Es una más de las tradiciones culturales mexicanas.

belhu.sanabria@laraza.com