Colt: el fabricante de armas suspende la fabricación de AR-15 y otros rifles para civiles

El CEO de Colt, Dennis Veilleux, dijo en un comunicado que la compañía no está finalizando permanentemente la producción del arma semiautomática AR-15, pero cree que ya existe un suministro adecuado de tales rifles en el mercado.

“El hecho es que en los últimos años, el mercado de fusiles deportivos modernos ha experimentado un exceso significativo de capacidad de fabricación”, dijo Veilleux.

En la epidemia de tiroteos masivos que se vive en Estados Unidos, los fabricantes y distribuidores prefieren eludir su responsabilidad, por ejemplo, Walmart pide a los clientes que no lleven abiertamente  armas a las tiendas.

Se han utilizado fusiles semiautomáticos AR-15 y armas similares de asalto en varios tiroteos masivos en los últimos años, incluso en dos mezquitas en Christchurch, Nueva Zelanda, en marzo; una sinagoga de California en abril; un concierto de Las Vegas en 2017; una escuela secundaria de Parkland, Florida, el año pasado; y la escuela primaria Sandy Hook de Connecticut en 2012.

En cambio, Colt se concentrará en cumplir los contratos militares y policiales con su fabricación de rifles. Veilleux dijo que a la compañía se le han otorgado contratos militares y policiales “significativos. Actualmente, estos contratos de gran volumen están absorbiendo toda la capacidad de fabricación de Colt para fusiles”.

La empresa está suspendiendo la producción de rifles para el mercado civil, para poder satisfacer las demandas de armas de sus contratos con la policía y el ejército.

La empresa Colt, con sede en West Hartford, Connecticut, ha recibido ya algunas críticas de los defensores de los derechos de armas por alejarse del mercado civil.

Veilleux dijo en el comunicado que la compañía sigue comprometida con la Segunda Enmienda y se está adaptando a la demanda del consumidor.

Un debate nacional sobre el control de armas se ha centrado en el acceso a AR-15 y otros rifles de asalto debido a su uso en tiroteos masivos. El CEO de Walmart, Doug McMillon, instó en agosto a los legisladores a considerar la restauración de una prohibición federal de los rifles de asalto, y el minorista anunció que terminaría con la venta de dos tipos de municiones, reporta CBS News.

El cambio siguió a dos tiroteos en las tiendas Walmart a principios de este año que mataron a un total de 22 personas. La compañía dejó de vender rifles de asalto en 2015. La prohibición de armas de asalto fue adoptada en 1994 y se dejó de aplicar una década más tarde.

Las estadísticas del FBI muestran que más de 2,3 millones de personas solicitaron verificaciones de antecedentes para comprar armas en agosto, frente a un poco más de 1.8 millones en julio. Esas aplicaciones, la mejor estadística disponible para rastrear las ventas de armas, han aumentado constantemente, con un ligero descenso después de que Donald Trump fuera elegido presidente en 2016.