¿Por qué las trufas son tan caras?

Las trufas son hongos comestibles que crecen de forma subterránea, al contrario que otros hongos que crecen fuera del suelo. Esto sucede porque las trufas sólo crecen en la oscuridad, de acuerdo con Reader’s Digest.

Todas las trufas crecen de la misma manera, pero hay diferentes tipos en el mundo. Las especies más conocidas son las trufas blancas, las trufas negras, las trufas de verano y las trufas brumales, entre otras.

Las trufas son muy caras por varias razones. Primero, no son un alimento que se pueda plantar, cultivar o cosechar fácilmente. Generalmente florecen en lugares donde hay humedad en los días cálidos y noches frescas.

También suelen crecer solamente en ciertos tipos de árboles, como los robles, los pinos y avellanos. Por eso, los campos italianos y franceses son donde se pueden encontrar más, así como en algunas zonas del noroeste del Pacífico y en Australia.

A esto, hay que sumarle que crecen muy lentamente. De hecho, algunas variedades necesitan de cuatro a seis años para desarrollarse.

Cuando ya están crecidas, las personas que las recolectan deben encontrarlas usando perros entrenados y con buen sentido del olfato. Una vez que las detectan, las trufas se desentierran cuidadosamente para evitar dañarlas.

Todo este gran esfuerzo hace que las trufas sean tan caras, pero aun así la gente está dispuesta a pagar su alto precio por su aroma y buen sabor.

La variedad más económica son las trufas negras, porque duran más tiempo y se pueden congelar. Por otro lado, las trufas blancas son más caras por ser raras, además de que duran una muy corta temporada y no se pueden congelar. Las trufas blancas europeas pueden venderse por hasta $3,600 dólares la libra.

–También te puede interesar: ¿Santa Claus fue creado por Coca–Cola?