Harry, el príncipe que quiso trazar una línea entre su vida pública y privada (y no siempre lo logró)
La vida del hijo menor del príncipe Carlos y Lady Di estuvo dominada por el servicio militar y su trabajo para asociaciones de caridad pero también tuvo momentos turbulentos durante la adolescencia
Su Alteza Real el Príncipe Henry, o más conocido como el príncipe Harry, sexto en la línea de sucesión al trono británico, creció bajo los reflectores de los medios de comunicación.
Las cámaras captaron cuando siendo muy joven tuvo que lidiar con la muerte de su madre, su a veces turbulenta adolescencia, su carrera en el ejército, su dedicación a obras de caridad y, en los últimos meses, los preparativos para su boda con la actriz estadounidense Meghan Markle.
Mientras pudo, él intentó trazar una línea entre su vida pública y privada.
Muchas veces buscó publicidad para promover las buenas causas que apoya, pero otras, puso un freno cuando la atención sobre él fue demasiada.
Harry pasó 10 años en las fuerzas armadas, en los que estuvo en acciones de combate dos veces en Afganistán, como copiloto y artillero de un helicóptero Apache.
Su carrera militar, de la que ha dicho que recordará “el resto de mi vida”, llegó a su fin en 2015.
En los últimos años ha enfocado su trabajo en obras de caridad vinculadas a la salud mental y la ayuda a los veteranos del ejército.
La parte más destacada del trabajo de Harry en esta área es su labor como presidente de la fundación que organiza los Invictus Games, una competencia deportiva internacional para exmilitares lesionados.
Lanzó la competencia en Londres en 2014 y desde entonces, una vez al año, los juegos se han desarrollado en Orlando (EE.UU.), Toronto (Canadá) y Sídney (Australia).
En los juegos de 2017 en Sídney, ocurrió la primera aparición pública de Harry con Meghan Markle. Fueron fotografiados tomados de la mano, alimentando la especulación sobre su relación que finalmente se confirmó con el anuncio del compromiso en noviembre de ese mismo año.
Piloto
Durante su carrera militar, Harry se convirtió en el primer miembro de la monarquía en más de 25 años en combatir en una zona de guerra.
Se sintió decepcionado en mayo de 2007 cuando los jefes del ejército decidieron no enviarlo a Irak ante la presencia de “riesgos inaceptables”.
En 2008, pasó 10 semanas sirviendo en Afganistán, pero tuvo que retirarse debido a las preocupaciones por su seguridad luego de que se filtraran noticias de su presencia encubierta en el lugar.
Regresó a Afganistán como piloto de helicópteros Apache entre septiembre de 2012 a enero de 2013, antes de convertirse en comandante en julio de 2013.
Más tarde dijo que en ese entonces había disparado contra insurgentes talibanes y describió la experiencia de estar en Afganistán “tan normal como debía ser” para él.
“Mala elección” de vestuario
Hubo veces en las que el príncipe tuvo fuertes roces con la prensa.
Un incidente temprano fue cuando Harry apareció fumando cannabis.
El Palacio de St. James de Londres confirmó en enero de 2002 que el entonces joven de 17 años había “experimentado con droga en varias ocasiones”, pero afirmó que el uso no era “regular”.
En octubre de 2004, tuvo un encontronazo con un fotógrafo fuera de un club nocturno.
Un portavoz real dijo en ese momento que el príncipe de 20 años “fue golpeado en la cara por una cámara cuando los fotógrafos se amontonaron a su alrededor”.
“Al empujar la cámara para hacerse lugar, un fotógrafo fue herido en el labio”, dijo el vocero.
En 2005, hubo una indignación generalizada cuando circuló una imagen del príncipe en una fiesta de cumpleaños de disfraces vestido de nazi.
“El príncipe Harry se disculpa por cualquier ofensa o vergüenza que haya causado. Se da cuenta de que fue una mala elección de vestuario”, decía un comunicado de ese entonces de la residencia real de Clarence House.
Y en 2009, Harry también se disculpó por usar un lenguaje ofensivo para describir a un miembro asiático de su pelotón en el Ejército después de que apareciera un video del incidente.
También hubo quejas contra la prensa desde Clarence House. En 2005 dijeron que la seguridad del príncipe estaba en peligro cuando los paparazzi siguieron a Harry y su novia, Chelsy Davy, mientras conducían por una ruta de tierra en Botswana.
Harry enfrentó dificultades cuando una exmaestra de arte en Eton afirmó que había sido ella quien hizo algunos de los trabajos que obtuvieron calificaciones excelentes, denuncias que luego fueron rechazadas en un tribunal.
Para contrarrestar los escándalos, el príncipe estuvo presente en los Juegos de Londres 2012, en los cuales fue embajador olímpico.
También se lo vio durante el Jubileo de la Reina en el mismo año y como parte de las celebraciones completó su primera gira real en solitario en el extranjero con visitas a Belice, las Bahamas, Brasil y Jamaica.
Sin embargo, en agosto de 2012 aparecieron fotos del príncipe y una mujer joven desnuda en una habitación de hotel en Las Vegas.
Las dos fotos, publicadas por primera vez en el sitio web estadounidense TMZ, fueron tomadas en unas vacaciones privadas con amigos.
“Probablemente me decepcioné a mí mismo, a mi familia, y a otras personas”, dijo más tarde.
“Pero en definitiva, yo estaba en un lugar privado y debería haber habido una cierta privacidad”, justificó.
Primeros años
El príncipe Harry nació en Londres, el 15 de septiembre de 1984. Fue bautizado con el nombre de Henry Charles Albert David en diciembre de ese año en la Capilla de San Jorge, en Windsor.
Pero desde el principio de su vida se anunció oficialmente que se lo conocería como Harry.
El príncipe siguió el camino educativo de su hermano mayor William, ingresando a la escuela Eton, de Londres, en 1998. Terminó la escuela en 2003 con excelentes calificaciones.
Antes de unirse al ejército, Harry se tomó un año sabático y trabajó en una granja de ovejas en Australia y con huérfanos del sida en Lesoto, África.
A pesar de que ahora tiene 33 años, para muchas personas en todo el mundo es difícil olvidar la imagen de él cuando tenía 12 en el funeral de la Princesa Diana, en 1997.
Caminó detrás del coche fúnebre que llevaba el ataúd de su madre a la Abadía de Westminster, acompañado por su hermano, padre, abuelo y tío.
Bloquear emociones
Harry fue el padrino en la boda de su hermano William en abril de 2011 y desde entonces ha hablado de lo difícil que fue no tener a su madre allí.
En los últimos años, recibió ayuda para lidiar con su dolor.
En una entrevista con el diario británico Daily Telegraph, explicó que bloqueó todas sus emociones durante casi 20 años y se negó a pensar en su madre.
Según confesó, eso tuvo un “efecto bastante serio” en su vida personal y su trabajo que lo llevó a un colapso “en numerosas ocasiones”.
También dijo que probablemente lamentará “por el resto de su vida” lo breve que fue su última conversación telefónica con su madre, a quien describió como “divertida”. Ella era una “niña hasta la médula”, dijo.
En los últimos años, Harry, William y la duquesa de Cambridge centraron sus esfuerzos de campaña en la salud mental.
Fundaron el grupo Heads Together (Cabezas Juntas), que tiene como objetivo abordar problemáticas mentales y la recaudación de fondos para nuevos servicios de apoyo.
Como uno de los solteros de más alto perfil del mundo, la vida amorosa de Harry despertó mucho interés a través de los años.
A finales de 2016, confirmó su relación con Meghan Markle, mientras emitía una declaración acusando a los periodistas de acosarla.
Habló de “batallas legales nocturnas para que las historias difamatorias en los periódicos no aparecieran”, los intentos de reporteros y fotógrafos para entrar en su casa y el “bombardeo” a casi todos sus amigos y seres queridos.
En septiembre de 2017, Markle dijo a la revista Vanity Fair que ella y Harry eran “dos personas realmente felices y enamoradas”.
En noviembre de 2017, la pareja anunció su compromiso y el 19 de mayo de este año contraerán matrimonio en una ceremonia que se celebrará en el Castillo de Windsor, en el sudeste de Inglaterra, en la que los flashes de la prensa tampoco faltarán.
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