¡Adiós Miopía! Conoce la cirugía LASIK que acaba con la vista borrosa

La cirugía LASIK es un procedimiento quirúrgico con una alta efectividad

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Crédito: Shutterstock

La miopía es una enfermedad ocular que puede ser abordada por cirugía láser. Una de las variantes más conocidas de cirugía láser es la cirugía LASIK, que tiene una trayectoria muy bien reconocida. Aquí te explicamos en qué consiste, aclarando antes lo que es la miopía.

¿Qué es la miopía?

Según la Clínica Mayo, la miopía es un trastorno visual común que consiste básicamente en la incapacidad por ver objetos lejanos de manera clara. Ocurre cuando la forma del ojo causa que los rayos de luz se refracten (inclinen) incorrectamente. Esto hace que las imágenes se enfoquen delante de la retina y no sobre ella.

Puede manifestarse rápidamente o de manera gradual. La vista con miopía frecuentemente empeora durante la niñez o la adolescencia.

Hablemos de la cirugía LASIK

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Fuente: Pixabay

La cirugía LASIK es la variante más conocida de las cirugías refractarias con láser, tanto así que muchos medios utilizan el término “cirugía ocular LASIK” para referirse a todas las variantes posibles de cirugías refractarias.

La cirugía ocular LASIK cuenta con una buena fama. La mayoría de las personas que la aplican tienen resultados muy satisfactorios y las complicaciones que pueden ocurrir son realmente mínimas.

Procedimiento

Antes de la cirugía LASIK, el cirujano evaluará minuciosamente las dimensiones del ojo. Posteriormente, usará un tipo especial de láser de corte para modificar con precisión la curvatura de la córnea.

Con cada pulso láser se extrae una pequeña cantidad del tejido de la córnea. Esto permite al cirujano aplanar la curvatura de la córnea o hacerla más pronunciada. El cirujano crea un colgajo en la córnea que luego levanta antes de seguir con la operación.

Existen variantes donde se levanta un colgajo muy delgado, no se levanta colgajo, o no se emplea ningún colgajo en especial.

Resultados y efectos secundarios

Efectos secundarios tales como sequedad del ojo y alteraciones visuales son muy frecuentes. Sin embargo, estas alteraciones desaparecen con algunas semanas o meses después del procedimiento, y son pocas las personas que afirman que son problemas a largo plazo.

Los resultados dependen del error de refracción y de otros factores. Quienes tienen miopía leve suelen tener los mejores resultados con la cirugía ocular LASIK. Las personas con un alto grado de miopía o que tienen hipermetropía tienen resultados menos predecibles.

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