¿Eres amante de la comida? Conoce el Síndrome de Gourmand

El Síndrome de Gourmand es una condición neurológica y alimenticia muy particular que involucra la apreciación que tenemos hacia los alimentos y la importancia que les otorgamos. Conoceremos más detalles a continuación.

¿Qué es el síndrome de Gourmand?

El Síndrome de Gourmand está vinculado a un determinado tipo de hábito y conducta alimenticia. Los pacientes con este síndrome tienen una preferencia notoria por las comidas altamente elaboradas, además de estándares de calidad muy altos.

Este síndrome está relacionado con lesiones en el hemisferio derecho, específicamente con el lóbulo temporal y frontal, por lo que entra en la categoría de trastornos neurológicos, pero también de trastorno alimenticio.

Por si no lo sabes, en el lóbulo frontal y el lóbulo parietal se encuentran las zonas asociadas con la toma de decisiones y la personalidad. En el hemisferio derecho también encontramos zonas vinculadas con las emociones y la motivación.

Características del síndrome de Gourmand

Las personas que experimentan el síndrome del Gourmand no lo consideran una enfermedad, sino que lo ven como un rasgo “benigno” que no incide negativamente en sus vidas.

La relación de las personas con síndrome de Gourmand respecto a la comida suelen ser anómalas y obsesivas: piensan sobre comida, discuten sobre comida, escriben sobre comida y, obviamente, comen. La comida se convierte en el eje de gran parte de sus actividades diarias.

Además, pueden tener antojos repentinos por platos que nunca hayan probado o que no les haya despertado intereses anteriormente. Sin embargo, estos platos no suelen ser rutinarios, sino comidas gourmet o que requieren mucho esfuerzo por cocinarse.

Se ha debatido que estos episodios de antojo no pueden caracterizarse como descontrol del apetito, sino de una selección sofisticada y frenética de alimentos. 

Aunque el síndrome de Gourmand no afecta necesariamente la salud, sí puede conducir a conductas alimenticias o sociales que reduzcan la calidad de vida de la persona, por lo que recomendamos la orientación de un especialista, sea psicólogo, neurólogo, o de otra área médica pertinente.